"La incertidumbre no es lo más cómodo": el silencio de la directiva del Athletic sobre su futuro que desconcertó a Raúl García

El futuro de Raúl García fue el último en resolverse el pasado mes de junio. El último día con contrato en vigor, el 30 de junio, Athletic anunció la renovación del delantero por una temporada más. Semanas antes, cuando finalizó la temporada, Raúl se fue de vacaciones sin saber si regresaría a Lezama. «Mi intención era clara, seguir aquí», sostiene ahora. «La decisión de renovar era desde el principio. En el momento en que el club tiene intención de renovarme, sé que no hay ningún problema», repite. Es más, como ya ha manifestado en anteriores ocasiones, la traba no estaba en el dinero: «Tengo prioridades mayores que lo económico. Para empezar, cualquier oferta que te hagan es para dar las gracias, creo que tenemos que ser así. A partir de ahí puedes estar más contento o menos, pero lo tenía muy claro. No ha sido ni va a ser un problema el tema económico», ha vuelto a decir ahora, cuando encara una nueva temporada como rojiblanco. Según ha relatado el navarro, el club no se dirigió a él o su agente en ningún momento durante la temporada para abordar su futuro. «A mí me gusta ser claro, honesto, decir las cosas como son. ¿Que me habría gustado que hubiese habido más conversación? Os lo digo aquí porque se lo he dicho a ellos», reconoce. «No he estado intranquilo, pero la incertidumbre no es lo más cómodo», añade. Sobre todo por «tener un futuro incierto cuando creo que me estoy implicando al 200%, necesito un poco más de lo que se dio. Por eso se me hizo duro». Cuando finalizó la temporada, Raúl hizo las maletas y se fue de vacaciones sin noticias del club. «Acabó la temporada, hablé con mi agente, le comenté que mi intención era seguir, que quería tener un verano tranquilo y necesitaba estar con mi familia y desconectar del fútbol, pero que la idea era seguir. Le dije que, cuando el club le comentase a ella que existía esa opción, no había nada más que hablar», relata. La falta de comunicación es algo que Raúl ha querido poner ahora sobre la mesa. Insiste en que «soy una persona con la que se puede hablar, que entiende los momentos del fútbol en cada situación de la vida. Sí me habría gustado que hubiera más conversación continua, para bien o para mal. No hablo de que me dijeran en diciembre que tenía que seguir, simplemente tener más conversación. Y es algo que he trasladado al club y que no tengo que esconder». «No es que me viera fuera, es que soy una persona madura que entiende que el fútbol son etapas. Si me hubieran dicho en diciembre [que no seguiría], yo no habría cambiado en absoluto. Yo soy una persona que intenta dignificar su profesión, hacer cada día lo máximo posible y eso no va a cambiar por que me digan que sigo o no sigo», explica. Aunque finalmente seguirá al menos una campaña más como león, en los últimos meses Raúl García no niega que por su cabeza ha pasado antes la opción de retirarse que la de buscar ofertas fuera para continuar jugando a fútbol. «Creo que estaba más cerca de dejarlo que de irme a otro equipo. Mi intención era clara, seguir aquí», afirma. Con todo, una vez resuelto su futuro, el delantero tiene claro que «intento sacar lo positivo. Si algo positivo me llevo de todo esto es el cariño que he recibido tanto por parte de mis compañeros como por la gente en la calle. Es algo que no busco pero que cuando te llega lo agradeces». También ha expresado Raúl su incomodidad con la fijación que existe a veces con los jugadores más jóvenes: «Yo entiendo que estoy en un club en el que se habla mucho de la gente joven. Esa es una de las cosas que me molesta. Yo entiendo que la gente comente que los jóvenes tienen que ir entrando, pero no que los veteranos quitamos minutos a los jóvenes. Creo que es un error porque nosotros somos los primeros que queremos ayudarles, pero estamos hablando de la élite y no se pueden regalar minutos a nadie», ha dicho. Por último, Raúl García ha reconocido que uno de los factores clave en su renovación ha sido el entrenador, Ernesto Valverde, sobre el que ha dicho que «no tengo ninguna pega con él. Creo que es una persona que me respeta, que cuando me tiene que decir algo me lo dice y tenemos una relación muy buena».

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El delantero, que extendió in extremis su contrato por una temporada más, trasladó al club su malestar por la tardanza en ofrecerle la renovación

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