Otxantegi Herri Lurra evita su desalojo del caserío abandonado en Berango que ocupó hace año y medio
La Comitiva Judicial ha pospuesto la intervención por la falta de efectivos policiales
La plataforma Otxantegi Herri Lurra se ha concentrado esta mañana en las puertas del caserío abandonado que ocuparon en abril de 2022 para evitar su desalojo. Estaba previsto que hoy hacia las nueve de la mañana la Comitiva Judicial al cargo, acompañada de efectivos policiales, llevara a cabo la intervención. Sin embargo, la treintena de personas que se han concentrado en el caserío ha hecho que se aplace la operación por la falta de agentes suficientes para lidiar con la concentración. La ocupación no se llevó a cabo para vivir en el caserío, sino para evitar la urbanización de una de las mayores zonas verdes del municipio, para evitar la "oleada de cemento".
Durante todo este tiempo, las personas que conforman Otxantegi Herri Lurra han trabajado la tierra y hecho una huerta, precisamente porque esas plantaciones pretenden ilustrar que los terrenos "dejarán de dar frutos para sostener bloques de hormigón y cemento". El acceso al caserío ha amanecido bloqueado por diez fardos de paja, una zanja y un bidón de agua de mil litros y al lugar se han desplazado dos vehículos de la Ertzaintza y otros dos de la policía municipal de Berango.
2.300 viviendas
La ocupación del terreno nace de la intención por parte del ayuntamiento de Berango de urbanizar el entorno y construir un total de 2.300 viviendas en edificios colectivos. La plataforma denuncia que esta construcción no responde a la necesidad de asegurar el derecho a la vivienda de las vecinas del municipio, sino que son "sus negocios a nuestra costa", afirman. Incluso vecinas y vecinos de la zona ya afirmaron a Radio Bilbao que esta modificación del terreno, recogida en el Plan Genera de Ordenación Urbana de 2011, les va a afectar. Maria Luisa, vecina de la zona, verá como su jardín se ve reducido en 28 metros cuadrados.