«Es un orgullo presidir el club de mis amores», dijo Jon Uriarte nada más ser proclamado el trigésimo tercer presidente en la historia del Athletic. También apuntó ser consciente de la responsabilidad que ello implicaba. El 24 de junio de 2022 alcanzó el sillón de Ibaigane tras imponerse con absoluta rotundidad a Iñaki Arechabaleta y a Ricardo Barkala en las urnas. El empresario ganó en todas las meses, lo que evidenció que su candidatura convenció a todas las franjas de edad de los socios rojiblancos. “En la primera temporada se hizo un buen trabajo, sin embargo no fuimos capaces de obtener los resultados que esperábamos. A nivel personal sí te deja cierto poso de decepción. Esta temporada ha ido muy bien, de sobresaliente. Te llena de orgullo, también de alivio por ser capaces de haberle dado la vuelta y te da muchas energías para afrontar lo que viene. Con hambre de conseguir más”, señaló Uriarte hace una semana en la rueda de prensa de balance que hizo en San Mamés. Lo cierto es que la etapa de Uriarte comenzó con un tropiezo, el de la polémica de Carlos Aviña, su apuesta para la dirección deportiva que era el punto del que todo partía, tal y como manifestaron desde Izan Athletic en campaña. Un problema se convirtió en una oportunidad y Mikel González ascendió para ser el CEO Deportivo. Uno de los grandes éxitos en el segundo año de mandato de Jon Uriarte ha sido la consecución del título de Copa del Rey. 40 años después de la última victoria ante el Barcelona, el Athletic volvía a conseguir el tan ansiado título tras derrotar al Mallorca en la final que se decidió en la tanda de penaltis. El actual presidente del Athletic, Jon Uriarte, tenía solo cinco años la anterior vez que el Athletic ganó la Copa del Rey. Y estuvo celebrándolo por todo lo alto junto a su familia, siguiendo cerca del puente del Ayuntamiento el recorrido de la gabarra remontando la ría de Bilbao. «Recuerdo muy poco», confiesa. Sí tiene guardados en la memoria los días previos a la gabarra. «Estaba en la ikastola y fuimos al bosque que teníamos al lado para recoger unos palos con los que hacer banderas. Luego dibujamos las banderas del Athletic. En aquella época las cosas no se compraban, sino que se hacían en casa», ha afirmado en declaraciones a los medios antes de volar hacia Bilbao. Otro de los grandes triunfos de esta junta directa es la revitalización de la asistencia a San Mamés. Ha ayudado el gran curso reciente de los leones, pero en el anterior ya se empezó a ver una mejoría. También ha abogado por que el primer equipo femenino actúe más a menudo en La Catedral, esta temporada han sido dos citas de Liga F y una de Copa de la Reina.