Bilbao ofrece menos información que Europa sobre la calidad del aire: diferencias en los baremos y solo cinco estaciones activas

La calidad del aire en Bilbao vuelve a ser objeto de debate por la falta de información pública y la ausencia de un sistema alineado con las recomendaciones europeas. Aunque la ciudad dispone de estaciones propias de medición —gestionadas por el Gobierno Vasco—, sus datos no se ofrecen de manera accesible en la web municipal, a diferencia de lo que ocurre en muchas ciudades europeas y españolas.

Además, la red autonómica utiliza una categorización distinta a la recogida en el estándar europeo AQI, lo que provoca valoraciones diferentes para una misma estación de medición dependiendo del portal desde el que se consulten los datos.

Diferentes resultados según la web consultada

Europa emplea seis categorías (muy buena, razonablemente buena, regular, desfavorable, muy desfavorable y extremadamente desfavorable). Sin embargo, la red vasca utiliza otra escala que finaliza en “muy mala”, una categoría menos, lo que modifica la percepción de la calidad del aire.

El ecologista Pedro Mier explica que esta diferencia produce incoherencias visibles:

“Si tú, en vez de entrar por el Gobierno Vasco, te vas al índice estatal y consultas esa misma estación, vas a ver que es distinto. Y si entras en el índice europeo, también es distinto. Allí funcionan con good o fair, o el estatal con bueno, y los resultados no coinciden”.

La comparación demuestra que la misma estación puede mostrar un nivel “razonable” en el indicador europeo, “bueno” en el estatal y “muy bueno” en la red vasca, dificultando una interpretación homogénea para la ciudadanía.

Bilbao, con menos información disponible que otras ciudades europeas

Pese a contar con estaciones propias, Bilbao no facilita sus datos de calidad del aire en su propia web, una práctica extendida en ciudades como Barcelona, París, Berlín o Copenhague, que ofrecen información detallada, accesible y en tiempo real.

Las organizaciones ecologistas critican esta falta de transparencia y señalan que la capital vizcaína debería alinearse con los estándares y la comunicación que exige la normativa europea de calidad del aire.

Europa obliga a homogeneizar los baremos antes de 2026

Según la nueva directiva, los Estados miembros tienen de plazo hasta el 11 de diciembre de 2026 para adaptar sus sistemas de medición a los indicadores europeos.

Desde el Gobierno Vasco confirman que han iniciado el proceso de revisión de los instrumentos de medición con el fin de garantizar el cumplimiento de estos requisitos.

Por su parte, fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica recuerdan que las comunidades autónomas tienen la competencia de gestionar sus redes, mientras que el Ministerio “recopila y unifica” la información finalmente publicada.

Ecologistas trasladan el problema al Ararteko

Ante la falta de homogeneidad en los datos y la escasa accesibilidad, Ecologistas en Acción ha trasladado el caso al Ararteko, que ya ha abierto una valoración preliminar.

La organización reclama transparencia, datos comparables y una comunicación clara para que la población pueda entender realmente qué aire respira en Bilbao y cuál es su impacto en la salud.