El auge de la fotografía en Bizkaia: Black Kamera y la EHU forman a las nuevas generaciones
La escuela fundada por Josu Zaldibar suma cerca de 5.000 alumnos y, junto a la Universidad del País Vasco, impulsa el camino desde la formación universitaria hasta la profesionalización
De la afición a la profesión: el camino para vivir de la fotografía desde Bilbao
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Bilbao
La afición por la fotografía crece en Bizkaia. Lo confirman no solo los premios internacionales en los que nombres vascos comienzan a aparecer con frecuencia, sino también las aulas de escuelas como Black Kamera, donde cada vez son más quienes deciden convertir su pasión por la imagen en una profesión. “Nadie nace sabiendo mirar. La creatividad se puede estudiar y trabajar”, ha explicado Josu Zaldívar, fundador de la escuela de fotografía documental Black Kamera. “En la escuela ya hemos pasado de los 4.500 a casi 5.000 alumnos y alumnas, y cada año hay más gente potente que hace cosas increíbles”, ha añadido Zaldibar.
Zaldibar fundó Black Kamera en 2012, después de años de formación y docencia. A día de hoy ha conseguido que la escuela mantenga una estrecha relación con la Universidad del País Vasco (EHU), con la que comparte programas como el posgrado en fotografía, un paso clave para quienes buscan profesionalizarse en este campo.
"El posgrado de la EHU me ha permitido profesionalizarme. Tenía trayectoria, pero muchos huecos de aprendizaje", ha contado Mara Mcmiller, estudiante de 28 años, que tras años aprendiendo de forma autodidacta decidió matricularse. “Dentro de tres años me gustaría estar haciendo grandes campañas y que me paguen bien por ello”, ha contestado Mcmiller a la pregunta de dónde se ve dentro de unos años.
En Bizkaia, contamos con estudiantes, con personas que se forman para ser grandes profesionales como Josu Zaldibar o Iván Amor Maeso, profesor de Black Kamera que ya vive de la fotografía. Su camino empezó en el mundo de las redes sociales, donde descubrió la necesidad de crear para los comercios imágenes de calidad: “Mucha gente no sabe hacer fotos para vender en redes. Empecé gestionando cuentas y acabé con una cámara profesional en las manos”, ha recordado en 'Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia. Hoy trabaja sobre todo en fotografía de eventos y automoción.
Móviles e inteligencia artificial
Tanto Mcmiller como Amor coinciden con el director de la Escuela en que la tecnología ha transformado la profesión, pero sin sustituir el ojo humano. “El móvil es una herramienta más”, ha apuntado Zaldibar que no ha dejado pasar la oportunidad para decir: “Pero hace falta algo más que un dispositivo, hay que tener mirada”.
La inteligencia artificial es otro de los grandes debates en el sector, de hecho, en Black Kamera ya se enseña a usarla como apoyo en la postproducción. “La IA ha venido para quedarse. Facilita flujos de trabajo, sobre todo en retoque y vídeo, pero hay que usarla con ética”, ha subrayado Josu Zaldibar. “Yo no voy a dejar de ser fotógrafa. Puedo usar la IA como herramienta, pero no para crear imágenes de cero. Eso es otro oficio”, ha añadido Mara.
