María Guardiola (PP) justifica su pacto con Vox: "Es preferible que me frustre yo a que se frustre el futuro de los extremeños"
La candidata a presidir la Junta de Extremadura ha presentado el acuerdo con la formación de Abascal en el que "cualquier cuestión ideológica" que les separa, como la violencia machista, está fuera del acuerdo
La candidata del PP a la Presidencia de la Junta de Extremadura, María Guardiola, junto al líder regional de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, tras firmar el acuerdo / Jorge Armestar (EP)
Madrid
La candidata del PP a la Presidencia de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha firmado este viernes con el líder regional de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, su acuerdo para materializar en la región un gobierno de coalición, 33 días después de las elecciones autonómicas. Guardiola y Gordillo han suscrito este acuerdo en la Sala de la Autonomía del Parlamento extremeño, con sonrisas y con un gran apretón de manos con el que han posado durante minutos ante los medios de comunicación.
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El Partido Popular y Vox han acordado un Gobierno de coalición en Extremadura que presidirá la popular María Guardiola y en el que la formación de Santiago Abascal tendrá una consejería, la de Gestión Forestal y Mundo Rural. Además, se va modificar el reglamento de la Cámara para que Vox entre en la mesa.
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"La violencia machista no aparece en el acuerdo"
Ambos partidos han alcanzado un acuerdo programático de 60 medidas que, por el momento, no han detallado pero que, según un comunicado conjunto, se centrarán en las "prioridades de las familias extremeñas y en combatir el paro, la pobreza, la falta de oportunidades y la despoblación". Guardiola ha destacado su "compromiso sincero" para que entre en vigor esas "medidas económicas y sociales" y que siempre va a estar a la escucha con un gobierno "de todos, para todos, sin rodillo y sin censura".
La líder del PP extremeña ha explicado que "la violencia machista no aparece en el acuerdo", tan solo un rechazo al discurso machista, porque "cualquier cuestión ideológica" que separa a ambas formaciones "está fuera del acuerdo".
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El "profundo proceso de reflexión" de Guardiola
La prensa le ha preguntado reiteradamente a María Guardiola sobre su cambio de opinión respecto al pacto con Vox. Ella ha explicado que, tras "un profundo proceso de reflexión" ha optado por el principio que le guía desde el principio: "El interés de mis paisanos, de los extremeños".
"Mi palabra no es tan importante como el futuro de los extremeños", ha reiterado. "Es preferible que me frustre yo a que se frustre el futuro de los extremeños", ha vuelto a argumentar, al tiempo que pide que se le juzgue "como presidenta" de la Junta. "Yo nunca he presentado mi dimisión. Soy consciente de que había mucha gente que yo diera ese paso, pero habría ganado la gente que quiere que esta tierra no prospere", ha afirmado.
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También ha querido dejar claro que la decisión se ha tomado en Extremadura y no en Génova: "He sido muy libre en tomar decisiones", ha afirmado Guardiola que insistía en que lo que le ha movido ha sido pensar en sus orígenes, en por qué quiso ser candidata. "Quería cambiar la vida de los extremeños y que su vida prosperase", ha sentenciado.
Guardiola cree que todo "se ha utilizado de forma torticera por el interés de quien nos quiere enfrentar" y se desentiende de las declaraciones e ideales del partido de Abascal: "Yo no asumo los postulados de Vox y ni Vox asume los del PP, somos partidos diferentes".
Se desvincula totalmente de las palabras del concejal de Vox de Mérida que dijo que "el día de mañana vamos a ver la bandera de los pedófilos", en referencia al Orgullo Gay. El líder de Vox en Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo, ha querido excusarle diciendo que se trata de una persona "sin experiencia", que "lleva poco tiempo en el cargo", y ha aclarar que "Vox respeta cualquier tendencia sexual" y que "no tiene que decir nada respecto de nadie por su condición sexual" y menos relacionarlo con "un delito o un comportamiento deshonroso".