El Ayuntamiento de Villanueva renueva y refuerza el servicio de teleasistencia domiciliaria
En la actualidad hacen uso de este servicio unas 200 personas
Aparato de teleasistencia / Cadena SER
El Ayuntamiento de Villanueva de la Serena ha anunciado la adjudicación y renovación del servicio municipal de teleasistencia domiciliaria, un recurso implantado desde 2003 y considerado esencial para la seguridad y autonomía de personas mayores y en situación de dependencia.
La actualización del contrato incluye el aumento de terminales disponibles y garantiza la continuidad del servicio, que ofrece atención bidireccional las 24 horas, respuesta inmediata ante emergencias, seguimiento permanente y recordatorios de medicación, entre otras prestaciones.
En la actualidad, alrededor de 200 personas son beneficiarias del servicio de teleasistencia domiciliaria, que incrementa el número de usuarios en 15.
Un servicio de teleasistencia que como explica la concejala de Servicios Sociales, Ana Mansanet “es uno de los recursos más valiosos que ofrecemos a quienes necesitan apoyo para afrontar situaciones de emergencia, inseguridad, soledad o aislamiento”, y que se ha consolidado como "una herramienta fundamental para la autonomía, el acompañamiento y la seguridad de muchas personas bien mayores o en situación de dependencia".
No solo se mantiene este servicio básico e imprescindible para muchas personas, explica la responsable de Servicios Sociales, “sino que hemos reforzado este servicio, aumentando el número de terminales, que se suman a los ya activos garantizando su continuidad”.
Destinatarios y solicitudes
Mansanet indica que este servicio está dirigido a personas mayores de 65 años en situación de riesgo, a personas con discapacidad, y en general, a cualquier ciudadano que, por su situación personal requiera un apoyo especial detectado por los servicios sociales.
Las personas interesadas pueden solicitar información o tramitar el alta en los servicios sociales de base situados en Plaza España. El Ayuntamiento reafirmó su compromiso de seguir invirtiendo en recursos públicos que garanticen un envejecimiento digno, seguro y autónomo para la ciudadanía.