Abascal y Óscar Fernández cierran la campaña de Vox en Extremadura con duras críticas al bipartidismo y un llamamiento al cambio

Badajoz

El presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, y el candidato de la formación a la Presidencia de la Junta de Extremadura, Óscar Fernández, protagonizaba este viernes el acto de cierre de campaña de Vox en el Palacio de Congresos de Badajoz de cara a las elecciones autonómicas del próximo 21 de diciembre.

El mitin, celebrado ante cientos de simpatizantes llegados desde distintos puntos de la región, sirvió para reforzar el mensaje central del partido durante la campaña, la necesidad de un “cambio político real” tras más de cuatro décadas de gobiernos alternos del PSOE y el PP.

Durante su intervención, Abascal destacaba el intenso recorrido realizado por Extremadura en los últimos días, asegurando haber visitado “hasta el último rincón” de la comunidad.

Abascal aprovechó el acto para responder a las críticas de la presidenta de la Junta, María Guardiola, a la que acusó de evitar los debates y de convocar unas elecciones “innecesarias y costosas” por lo que calificó como un “capricho personal”. En tono irónico, el dirigente explicó que abandonaría Extremadura antes del día de las elecciones para regresar con su familia, aunque aseguró que, si fuera necesario, volvería a la región tras los comicios para apoyar a Óscar Fernández en las negociaciones políticas que pudieran producirse.

El presidente de Vox insistía en que su formación ha sido “clara y coherente” durante toda la campaña y afirmó que sus propuestas eran conocidas por los extremeños incluso antes de la convocatoria electoral. En este sentido, cargó duramente contra el bipartidismo, al que responsabilizó del abandono de Extremadura, de la despoblación y de la falta de infraestructuras clave, como las ferroviarias. “No pedimos milagros, pedimos que los trenes lleguen y paren”, trasladaba.

Abascal también criticó al Gobierno central y al PSOE por lo que considera un desprecio hacia los extremeños, así como al PP por su actuación tanto a nivel nacional como europeo. El líder de Vox denunció que ambas formaciones “discuten en España pero pactan las mismas políticas en Bruselas”, especialmente en materia agrícola, energética y medioambiental, políticas que, a su juicio, están perjudicando gravemente al campo extremeño.

Uno de los momentos centrales del discurso fue el llamamiento explícito al voto. Abascal, que aseguró no ser partidario de pedir el voto de forma directa, animó a los asistentes a movilizar a familiares y amigos en los últimos días de campaña. En su mensaje incluyó tanto a votantes tradicionales de la derecha como a personas de izquierdas desencantadas con la corrupción y las políticas actuales. “Estamos construyendo un proyecto en el que caben todos los españoles”, afirmaba.

El presidente de Vox dedicó buena parte de su intervención a enumerar lo que considera los principales problemas de Extremadura, la crisis del sector agrario, la situación de los autónomos, la falta de oportunidades para los jóvenes, la emigración, el acceso a la vivienda, las listas de espera en la sanidad pública y el deterioro del sistema educativo. Frente a ello, defendió un programa basado en la reducción del gasto político, la bajada de impuestos y la priorización de las familias y de los extremeños en el acceso a ayudas sociales.

Por su parte, Óscar Fernández tomaba la palabra para agradecer el apoyo recibido durante la campaña y, especialmente, la implicación personal de Santiago Abascal y de la dirección nacional del partido. El candidato aseguró sentirse “emocionado” por el respaldo ciudadano y afirmó que Vox es “un partido fiable” que no cambia de discurso en función de las encuestas o de los resultados electorales.

Fernández acusó directamente a María Guardiola de haber “robado el cambio” a los extremeños tras las últimas elecciones y de haber preferido negociar con el PSOE antes que mantener acuerdos con Vox. En este sentido, recordó la salida de su formación del Gobierno autonómico y responsabilizó al PP de la convocatoria electoral y del gasto económico que esta ha supuesto.

El candidato insistió en que estas elecciones “van de sentido común” y enumeró algunas de las principales propuestas de Vox: la defensa de la central nuclear de Almaraz, el impulso al proyecto de regadío de Tierra de Barros, la bajada de impuestos, la protección del sector primario y la creación de oportunidades para que los jóvenes puedan desarrollar su proyecto de vida en Extremadura.