Detenido un vecino de Abegondo que disponía un taller de impresión de armas
La policía nacional interviene en su domicilio un subfusil AR9 ensamblado con piezas impresas en 3D
A Coruña
Un hombre ha sido detenido en Abegondo acusado de tener un taller clandestino de impresión de armas en su domicilio. Disponía, según la policía nacional, de un subfusil AR9 fabricado en buena parte con piezas impresas en 3D. Tenía otras piezas de armas cortas también impresas.
En sendos registros domiciliarios, la policía constató la existencia de "un completo taller ubicado en la vivienda". Esta actividad ilícita la complementaba en su lugar de trabajo donde aprovechaba sus conocimientos técnicos en la fabricación de piezas metálicas, necesarias para el ensamblaje de las armas que fabricaba. La investigación, bajo el nombre de Operación Odilo, se inició a principios de año cuando agentes especializados en el ciberpatrullaje detectaron un canal internacional integrado por usuarios de distintos países que intercambiaban información relativa a la fabricación de estas armas. Uno de sus miembros más activos era el vecino de Abegondo ahora detenido, según informa la policía nacional.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes especializados de la Comisaría General de Información, con la colaboración de la Brigada Provincial de Información de A Coruña y bajo la dirección del juzgado de instrucción número tres de Betanzos, informa este jueves la Policía Nacional en un comunicado.
La investigación que culminó con este arresto se inició a principios del año en curso cuando agentes expertos en ciberpatrullaje detectaron un canal internacional integrado por usuarios de diferentes países cuyo idioma mayormente empleado era el castellano. Por esa vía, intercambiaban información sobre armas.
Hechas las oportunas pesquisas, subraya la nota, sus integrantes fueron ubicados en España y Latinoamérica, con el matiz de que uno de los más activos residía en Galicia. Era el que se ofrecía a dar consejos y a facilitar documentación.
Después de localizar su ubicación, el pasado viernes se efectuaron dos entradas y registros donde se comprobó la existencia del negocio clandestino en el interior de la propia vivienda. También que esta actividad ilegal era complementada en su lugar de trabajo, del que no se dan datos, por aprovechar sus conocimientos técnicos para el ensamblaje.
Disponía el arrestado, aparte de todo lo mencionado, de un armazón y una corredera, para amalgamar, elaborados en 3D mediante fibra PETG. Además, contaba con una gran cantidad de rollos de esa fibra destinados a la impresión de nuevas piezas, ordenadores, planos, documentación, miras telescópicas, y armas airsoft (categoría incluida dentro de las de aire comprimido).
Sobre las citadas ballestas, una era tiragomas de gran potencia y otra una modificada junto a un gran número de flechas.
El detenido, según los investigadores, estaba completando la fabricación de un subfusil AR9, algo que fue abortado por esta operación.
El proceso de elaboración de armas de forma híbrida (3D conjugando piezas metálicas) se implementaba mediante la compra de elementos en el comercio online.