La política fiscal agranda la brecha entre Gobierno y comunidades

Santiago de Compostela

La política fiscal se ha convertido en un caballo de batalla entre el Gobierno central y las comunidades autónomas, especialmente las del Partido Popular. La ministra de Hacienda afeó a estos territorios que hayan iniciado una competición por ver quién baja más impuestos, mientras que el presidente de la Xunta de Galicia considera que el Gobierno de Sánchez está desnortado en materia impositiva.

En la rueda de prensa en la que dio cuenta de las nuevas medidas fiscales, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, abogó por armonizar la política fiscal, y señaló que la competición entre autonomías para bajar los impuestos puede perjudicar al Estado del Bienestar. Y es que el Gobierno aboga por una política fiscal que es muy diferente a la de la Xunta, y que está más centrada en gravar a los más ricos para poder aligerar la presión fiscal que tienen que soportar las rentas más bajas.

Montero habló sobre la guerra fiscal iniciada por varias comunidades, capitaneada desde Génova y a la que se ha sumado Galicia. En su opinión, no es conveniente una deflactación del IRPF como la que propone Galicia, sino que apuesta por ayudar a la población más vulnerable. Además, alertó de los peligros de bajadas indiscriminadas de impuestos. Sobre este asunto, reclamó que "haya un debate fiscal ordenado y riguroso", pero remarcó que entrar en esa carrera "deteriora los servicios". "No se trata de ver quién bajar más los impuestos, es perjudicial para el Estado de Bienestar y la economía", agregó, antes de pedir "coordinación" y "responsabilidad" a la hora de que las comunidades ejerzan su competencia fiscal.

Un sainete

El presidente gallego, metido de lleno en esta carrera, tildó de "sainete" las medidas fiscales del Gobierno y cuestionó el plan. Alfonso Rueda se quedó en la forma y centró parte de sus críticas en la división en el Ejecutivo de Sánchez. El presidente de la Xunta cree que se pueden bajar los impuestos y mantener o mejorar la calidad de los servicios públicos.

Alfonso Rueda garantiza que la comunidad seguirá su senda particular de bajada de impuestos.