Aciertos y errores a la hora de hacer deporte en el embarazo

Lugo

Estar embarazada no es estar limitada, enferma o incapacitada. Con el paso de los años, cada vez son más las mujeres que entienden y disfrutan de las ventajas de un embarazo activo. El matrona y enfermero Cristian Martín asegura que hay estudios recientes que evidencian la efectiva relación entre embarazo y deporte.

Con el ejercicio ganan los dos: madre e hijo. El experto asegura que disminuye la incidencia de patologías gestacionales en la mujer, como la diabetes, y que ayuda y mejora el bienestar físico y emocional de la gestante. El bebé reducirá las opciones de prematuridad y aumentará, por ejemplo, el porcentaje de masa magra.

Desde caminar o subir escaleras hasta la práctica de ejercicios más complejos: "siempre preparamos sesiones de ejercicio basados en fuerza, resistencia, flexibilidad, elasticidad, suelo pélvico, movilidad articular y relajación. Trabajamos con diferentes metodologías como pilates o AIPAP-TERRA que además de conseguir los objetivos a nivel físico, nos permite que las mujeres hagan tribu y se diviertan mientras ejercitan su cuerpo”, explica.

Al final, hacer deporte no debe de ser una tarea más que tachar de la lista al final del día si no que las mujeres han de hacerlo también por sentirse bien. Es por ello por lo que no es bueno ser intransigentes o marcar unas sesiones estrictas de entrenamiento.

Si bien es cierto, existen recomendaciones, ya que de poco o nada valen los atracones de entrenamiento, lo realmente beneficioso es la constancia. “Las recomendaciones actuales están en realizar 150 minutos de actividad física moderada repartidos en un mínimo de 3 días a la semana, pero se recomienda realizar todos los días algo de ejercicio", matiza.

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Disciplinas prohibidas

Pese a que socialmente se tiende a pensar que durante los meses de gestación se debe de disminuir la carga y los esfuerzos, lo cierto es que apenas hay disciplinas deportivas contraindicadas: "realmente son muy pocos los deportes contraindicados en la gestación, entre ellos se incluyen los deportes de alto riesgo como alpinismo, escalada a alturas superiores a 2500 metros o boxeo, por ejemplo”.

En muchas ocasiones se presta más atención a los peligros generalizados, o mitos preconcebidos, que a lo que realmente importa: el cuerpo de cada una.

Para Cristian es "importante la realización de una buena historia clínica previa, y aquí la figura de la matrona es muy importante ya que conoce el embarazo y a la mujer desde el principio y puede dar recomendaciones específicas a su estado de salud actual… yo he tenido pacientes que realizaban crossfit antes del embarazo y lo han hecho hasta la semana 40".

Adaptando la realidad de cada mujer se puede seguir disfrutando, en la mayoría de los casos, de la rutinas establecidas previo embarazo. Pero también cabe destacar que lo que no se hacía antes no se debe hacer en esta nueva etapa.

No todas somos Ana Peleteiro

Cada vez son más mamás las que se lanzan a contar su nueva aventura en redes sociales. Muchas mujeres deportistas, como la atleta Ana Peleteiro, han querido compartir el procesos son sus followers, pero, ojo, ellas no son tú.

Los expertos comienzan a detectar cierto 'boom' entre las embarazadas a la hora de querer practicar deporte. Las redes sociales son la fuente de inspiración de muchas personas, y está bien mientras adaptemos los que vemos a las realidades de cada una.

El experto aclara que :"si no has hecho deporte en tu vida, no empieces en el embarazo. No vas a ser Ana Peleteiro, ella es una atleta de alto nivel que lleva practicando deporte toda su vida. Está bien que te inspire y que te motive a hacer cambios en tu vida, pero no puedes querer ser alguien que no eres".

Romantizar el ejercicio también puede tener consecuencias negativas. Seguir videotutoriales de personas que no se sabe si están cualificadas, que no ven si se estña realizando de manera correcta la postura o simplemente son rutinas no adaptas al embarazo puede tener una repercusión negativa.