Los médicos de Burela denuncian con cifras la discriminación de los pacientes

Lugo

En la cuarta semana de concentraciones, los médicos del Hospital de Burela hacen públicos los datos de las listas de espera elaboradas por ellos mismos. Se trata de las cifras "reales", aseguran, de lo que tardan en ser atendidos los pacientes mariñanos en comparación con el resto de la provincia y de Galicia. Han recabado los datos para que "la población sea consciente de la situación de desamparo" que viven los usuarios de la sanidad pública en la provincia.

Según recogen, la planta de hospitalización lleva cerca de un año cerrada por la falta de especialistas, que también afecta a las consultas externas. De los 366 pacientes que llevan más de un año en la lista de espera y todavía no han sido citados en la provincia, solo 3 son de Lugo, el resto de A Mariña.

Para ser consultado por un cardiólogo en el Hospital de Lugo la espera es de 60 días, mientras que en A Mariña asciende a 294. Dos meses en Lugo, frente a los 9 meses y 20 días en la comarca del norte de Lugo, que contrastan aún más con los 28 días del Hospital de Monforte.

En el servicio de medicina interna, uno de los grandes afectados, señalan los médicos, la inestabilidad de la plantilla hace imposible llevar a cabo un "seguimiento adecuado de los pacientes". Explican que los facultativos asignados a cada enfermo cambian constantemente porque abandonan el centro debido al "maltrato laboral" que sufren.

Por este motivo, ya no solo se derivan ingresos al HULA, sino directamente las consultas. La espera por ellas llega a superar los 54 días, el doble que la media de la comunidad autónoma. Además, en toda Galicia hay 119 pacientes que llevan más de un año esperando por una consulta de medicina interna, todos ellos son de A Mariña.

Otra de las cuestiones que más afectan a los pacientes es el tiempo que tardan los resultados de las biopsias: hasta un mes para saber si tienes cáncer o no. Además, si el resultado es positivo, hay que sumar también retrasos en las pruebas complementarias y en los tratamientos.

Los médicos del hospital ponen el acento en la gravedad de la situación con cifras, negro, sobre blanco, que demuestran la "discriminación" y el "desamparo" de los pacientes mariñanos. Piden que se redistribuyan los recursos humanos del Área Sanitaria de Lugo, A Mariña y Monforte e incluso, si es necesario, que se envíen médicos de otros hospitales gallegos.