El punto de vista de Pity Alarcón: 'Un acto de dignidad'

Murcia

El verbo dimitir no forma parte del lenguaje de la mayoría de los políticos. Y ciertamente, es un acto de absoluta dignidad cuando las dimisiones se producen no porque el personaje haya sido cogido en flagrante delito, sino porque el individuo en cuestión, tiene sentido de la dignidad y del decoro y asume con responsabilidad, por ejemplo, los resultados electorales no satisfactorios de su formación política.

Esto es lo que ha ocurrido con al candidato socialista en las pasadas elecciones municipales en Torre Pacheco, Carlos López Martínez que tras los malos resultados cosechados por su formación política en las pasadas elecciones ha dado un ejemplo de coherencia, de responsabilidad personal, manifestando que “hay que dejar paso a otra gente para poder seguir trabajando, porque después de los resultados no se ve con la fuerza necesaria para continuar”.

En la anterior legislatura, los socialistas gobernaron en coalición con el Partido Independiente de Torre Pacheco. El PSOE tenía cinco escaños, mientras que en estos comicios del 28M han perdido dos, pasando de ser la segunda fuerza política a la última. Y López Martínez asume su responsabilidad ante estos resultados, aunque los mismos sean consecuencia del populismo que nos arrastra. Un populismo encarnado en Vox, que vende con gran facilidad sus propuestas para derogar las leyes de Protección del Mar Menor, que permitirían que los agricultores, algunos de ellos, que tanto han colaborado en el deterioro de la laguna salada puedan continuar haciendo de su capa un sayo, sin tener en cuenta la protección de dicha laguna.

Confiemos en que Europa no permita tamaño desatino, pero en este rincón, lo que queremos es destacar la lección de dignidad de un político capaz de asumir los resultados.

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Pity Alarcón