Yolanda Díaz e Irene Montero muestran sus diferencias por el papel de Podemos en el espacio de Sumar

Las formaciones a la izquierda del PSOE comienzan poco a poco a dibujar su espacio de cara las próximas elecciones, las municipales y autonómicas de 2023. Conscientes de que a estos comicios les seguirán unos generales, que decidirán el Gobierno de cara los siguientes cuatro años, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, lanzó hace apenas dos semanas la plataforma con la que previsible se presentará, apodada como Sumar.

Antes de definirla quiere realizar un proceso de escucha de los agentes sociales y será entonces cuando lleguen las decisiones importantes y se vaya aterrizando el proyecto a algo más palpable. A pesar de que rehuye de la estructura tradicional de los partidos, sí que ha admitido que se integren en su futura formación algunos de ellos, como puede ser Podemos, Más País o Izquierda Unida. Sin embargo, los morados chocan en algunos aspectos con la idea de Díaz, como se ha podido observar este lunes.

La vicepresidenta y la ministra de Igualdad, Irene Montero, han participado -por separado- en un curso de verano organizado por Podemos, en donde ambas han dejado claro que no ven de la misma manera ni el protagonismo que tiene que tener la formación morada, ni la estrategia para reorganizar ese espacio político. Lo que viene a decir Yolanda Díaz es que Podemos puede estar en su proyecto, pero no comérselo: "En el diálogo con la sociedad que hemos iniciado deben de estar todos los partidos, todos cuantos quieran, incluido Podemos, por supuesto. Pero no son el todo de la respuesta social que ahora necesitamos. Por tanto, creo que tienen que estar en ese movimiento ciudadano, pero no ser dicho movimiento".

Además, la política gallega ha vuelto a mostrar su rechazo por las estructuras internas de las formaciones políticas: "En los partidos perviven estructuras jerárquicas, acabismos e inercias que no siempre son capaces de acompañar el pulso de la sociedad. Creo que es más importante que nunca tender la mano y apostar por el diálogo. No hay transformación ni ensanchamiento de la democracia sin el reimpulso de un movimiento ciudadano. Pablo Iglesias y Podemos han resquebrajado el bipartidismo, pero toca dar un paso más, el de ensanchar la democracia y hacerlo para poder ganar este país".

En la otra cara de la moneda se ha encontrado la responsable de Igualdad, Irene Montero, quien desde el mismo curso de verano ha reivindicado el papel de su formación desde su nacimiento en 2014 y su integración en el Ejecutivo tras la moción de censura contra Mariano Rajoy: "Nadie como Podemos ha luchado porque exista una coalición de Gobierno ni nadie como Podemos está cuidando y garantizando la permanencia y estabilidad de dicha coalición. Además, nadie como nosotros está garantizando que el Ejecutivo haga lo que dice que va a hacer. Si el Gobierno de coalición actúa igual que los gobiernos del bipartidismo, alomejor no es una herramienta útil para el proceso de democratización".

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En este sentido, mientras Díaz ha hecho hincapié en el diálogo, Montero ha optado por otro argumentario: "Estamos en un momento en el que es más importante que nunca confrontar los proyectos políticos y precisamente por eso tratan de taparlos con mentiras y con fake news. Que Podemos no gobierne y que su forma de hacer política, que tiene como eje central el ejercicio del poder para transformar la sociedad, deje de estar presente en las instituciones de nuestro país y particularmente en el Gobierno de coalición es sin duda el objetivo principal de los sectores reaccionarios en el siguiente ciclo electoral que se abre".

Así, la jornada de este lunes ha evidenciado que todavía hay muchos aspectos en los que hace falta un consenso de cara al proyecto que Yolanda Díaz pretende presentar, uno de los más importantes es sin duda volver a reunificar a los partidos de izquierda, entre los que se encuentra un Podemos que no parece dispuesto a aceptar cualquier propuesta.