Los otros son los ricos
Sigo sin entender que los votantes de la ultraderecha crean una de las principales consignas de esa ideología, la que afirma que la culpa de todo la tienen los inmigrantes
Los ricos sin escrúpulos nos explotan a todos y en todas partes
Madrid
La ultraderecha lleva décadas creciendo en Europa y aun así sigo sin entender que sus votantes crean una de sus principales consignas, la que afirma que la culpa de todo la tienen los inmigrantes. La pobreza, la incertidumbre, la erosión de los derechos laborales, la falta de esperanza en el futuro, incluso la baja natalidad de los “autóctonos”, todo es culpa de la llegada de personas procedentes de otros países con menos recursos económicos.
En otros tiempos se apaleaba a los pobres o se les condenaba a la marginalidad como si, acabando con ellos, se pudiera acabar con la falta de riqueza y algo parecido ocurre con este argumento falaz que los neofascistas repiten sin cansarse. Los inmigrantes te quitan un trabajo que en realidad no quieres hacer, viven en los barrios en los que no quieres vivir y tienen vidas de mierda que no quieres tener, pero, nos dicen, son los culpables de que no tengamos ni buenas viviendas, ni buenos trabajos, ni buenas vidas.
Como si la gente no tuviera otra cosa que hacer que desplazarse a un país que no conoce para vivir mal aposta, solo por fastidiar. Esta visión escapa tanto a la lógica y la razón que a veces parece pura superstición. Acabar con los pobres no hará que deje de existir la pobreza, impedir la entrada de inmigrantes no hará que en Europa haya más bienestar y menos en la economía global donde todo está conectado.
¿Está usted en contra del retroceso de los derechos laborales? Pues pídales a las grandes corporaciones que dejen de explotar a los trabajadores vivan en el país que vivan. La división más importante que sigue existiendo es la de siempre, la que marca el tener o no tener recursos, el tener o no tener poder para extraer de la fuerza de la mayoría la riqueza obscena que va acumulando una minoría. Los otros que vienen a robarnos el trabajo y nuestra forma de vida no son los inmigrantes, por mucho que se repita el mantra, son los ricos sin escrúpulos que nos explotan a todos en todas partes.
Giorgia Meloni llega a tiempo para enrubiar el neofascismo
Najat el Hachmi
Najat el Hachmi (Nador, Marruecos, 2 de julio...