El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha reconocido este sábado en su intervención en la IV edición del Foro económico de La Toja que, aunque la apertura económica de Europa ha significado una «gran ventaja para ganar productividad», ahora esto «ha pasado a convertirse en un elemento de vulnerabilidad». Las palabras de Cos se han dado en una mesa redonda sobre el futuro de la globalización en la que se ha resaltado que, a pesar de las dificultades, una vez superados los problemas, Europa estará más integrada. «Europa se enfrenta al doble riesgo proveniente de una elevada integración en las cadenas globales de valor y, al mismo tiempo, de esa elevada dependencia en determinadas importaciones y exportaciones, inversiones financieras e infraestructuras de pago», ha añadido el gobernador del Banco de España. En concreto, ha señalado las dependencias de la Unión Europea en el ámbito energético, ya que «Europa importa el 60% de energía» o en el tecnológico, con escasez de producción de semiconductores y otros productos como ordenadores. Pero Hernández de Cos cree que «tenemos el mejor mecanismo para tratar de compensar esos potenciales efectos degenerativos» de un eventual proceso desglobalizador, pues «el mantra de que se resuelve con más Europa, vale para este problema». Para reducir las vulnerabilidades de la UE, el gobernador ha enumerado tres tipos de políticas. Un primer conjunto de medidas tendría como objetivo evaluar las dependencias y las vulnerabilidades a las cadenas de suministro y aumentar la resiliencia del sistema industrial europeo. En segundo lugar, De Cos ha afirmado que hay que proteger a los países de la Unión Europea de posibles comportamientos abusivos adoptados por terceras economías, con medidas como, por ejemplo, monitorizar los flujos de inversión extranjera directa provenientes de terceros países y las destinadas también a limitar las acciones positivas a las que pueden verse sometidas las empresas europeas. Por último, la tercera política permitiría preservar la igualdad de condiciones a nivel internacional, compensando las ventajas competitivas a las que podrían enfrentarse las empresas de la Unión Europea debido a las políticas medioambientales y de ayudas estatales menos estrictas por terceros países. En este sentido, el gobernador del Banco de España ha defendido que para cumplir este tipo de políticas se requiere de «una acción concertada común conjunta de la Unión Europea» y es «indispensable» una mayor integración europea y, en particular, en el proyecto de unión económica y monetaria. Sobre los debates de actualidad en España, De Cos ha aclarado en su intervención que no iba ha hablar del pacto de rentas, que «llevamos defendiendo desde octubre de 2021 como una necesidad para evitar una espiral inflacionista». Además, sobre política fiscal ha pedido que, como consecuencia de espirales inflacionistas o dificultades por el alto endeudamiento público, debe haber «una política presupuestaria para los más vulnerables».