Irene Montero no ha vuelto a hablar con Llop desde la entrevista en la SER del martes: "Deseo que podamos volver a negociar cuanto antes"
La ministra de Igualdad ha respondido las preguntas de Àngels Barceló en medio del desacuerdo en el Gobierno de coalición por la reforma de la ley del 'solo sí es sí'
Madrid
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha pasado por los micrófonos de la SER en plena polémica por la reforma de la ley del solo sí es sí por las rebajas de penas y excarcelaciones de condenados, y, sobre todo, tras la proposición de ley que ha registrado el PSOE en solitario para cambiar ese efecto indeseado de la ley. La tensión entre los socios de Gobierno aumentó aún más este martes cuando, en una entrevista en Hoy por hoy, la ministra de Justicia, Pilar Llop, dijo que sería sencillo demostrar la violencia en una violación "con una herida" y acusó a los socios de coalición de "confundir a la opinión pública". Tras meses de diálogo entre ambos ministerios, Irene Montero reconoce que desde esa entrevista en la SER no ha vuelto a hablar con Llop pero subraya que ella no se ha "levantado de la mesa": "Llevamos meses hablando e intercambiando propuestas por escrito porque para nosotras es fundamental dar una respuesta unitaria como gobierno. La línea roja estaba en no volver al Código Penal de La Manada", explica.
Irene Montero, ministra de Igualdad, sobre la rebaja de penas por la aplicación de la ley del 'solo sí es sí': "Nadie se esperaba que esto pudiera pasar"
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Antes de la ley del solo sí es sí, para que una agresión sexual fuera considerada como tal tenía que haber violencia o intimidación, si no, era abuso. Desde su aprobación, todo acto sin consentimiento es considerado agresión sexual. La reforma que propone el PSOE consiste en volver a las penas anteriores a la ley cuando haya violencia o intimidación, algo con lo que Unidas Podemos está totalmente en contra: "Las feministas no hemos peleado un cambio de nombre sino porque no sea más creíble el testimonio de la víctima si tiene una herida más grande". A Montero esa discrepancia con su socio de gobierno le parece "muy dolorosa" porque supone "volver atrás", a "la idea del calvario probatorio en el que la credibilidad de la víctima se basaba en si había habido violencia": "Creía que estaba superado", lamenta. Pese a todo, la ministra de Igualdad sigue teniendo esperanza: "Hay muchas opciones para hacer una reforma que nos pueden permitir llegar a un acuerdo".
"Yo he hecho hasta seis propuestas"
"Yo he hecho hasta seis propuestas para reformar el Código Penal y creo que hay margen para el acuerdo por eso no he entendido por qué han presentado esa proposición en solitario", lamenta la ministra de Igualdad, que reconoce que no se esperaba que el PSOE registrara "una propuesta que suponía volver al Código Penal anterior". Recuerda además que "ninguna reforma penal va a evitar la rebaja de penas" y cree que por eso había margen para el acuerdo. "Desearía que tengamos un acuerdo antes de que esa iniciativa inicie su trámite parlamentario con los votos de PP y Vox", sentencia.
La ministra Montero insiste en que "la mayoría de jueces y juezas están aplicando bien la ley y el derecho transitorio" y que "es una minoría la que está planteando resistencias a su correcta aplicación". Todas las condenas por delitos contra la libertad sexual se tienen que revisar en virtud de la aplicación de la nueva ley, ya sea de oficio o a petición de parte. Según datos recopilados por la red de emisoras de la SER en once comunidades autónomas el pasado 3 de febrero, ya se habían revisado unas 750 condenas y se habían rebajado las penas en 270 casos y mantenido en 480. Es decir, se habían rebajado en el 36% de los casos y mantenido en el 64%.
Montero matiza que lo que está pasando con la reducción de penas "no es que sea un efecto indeseado es que nadie se esperaba que esto fuera a ocurrir". Revela además que cuando estaba trabajando en la ley con el ministro de entonces de Justicia Juan Carlos Campo, "el Poder Judicial alertó de que podían rebajarse penas porque la primera propuesta que hacemos de esta ley rebajaba penas máximas" y por eso se optó por mantener las penas máximas tal y como estaban en el anterior Código Penal. Lo que se modificaron finalmente fueron las penas mínimas porque se amplió la horquilla de las condenas: antes iban desde los 6 a los 12 años y con la nueva ley, desde los 4 a los 12.
La responsable de Igualdad también recalca que "el consentimiento ya estaba en el Código Penal anterior" pero que lo que cambia con la ley del solo sí es sí es "una forma diferente de juzgar los delitos sexuales" que no ponga el foco en la víctima y en lo que hizo sino en "si el agresor se aseguró de que había consentimiento". También ha señalado que "la mayoría de agresores sexuales en este país no han pisado un juzgado en su vida en España" y que esta ley "da obligaciones al Estado para con todas las mujeres agredidas en cualquier caso. Desde las que denuncian hasta las que no", que son mayoría.
"Si tenemos que pedir perdón, lo haremos"
Ante este cruce de acusaciones, las víctimas están en medio. "Si como Estado tenemos que pedir perdón a las víctimas que lo consideren, lo haremos, pero también explicando la verdad, que las decisiones de esas rebajas de penas son una minoría de jueces que no están aplicando bien la ley y el derecho transitorio", asegura Montero.
La ministra cree que estas discrepancias entran dentro de la normalidad: "Siempre que las feministas hemos avanzado en derechos ha habido conflictos. No sé si alguien se podía esperar que no hubiera resistencias". Recuerda además las discrepancias a la hora de sacar adelante otras leyes como la del aborto o la trans y cuántas veces le dijeron que nunca saldrían adelante.
Elisa Muñoz
Periodista en Cadena SER desde 2008. Primero en programas como 'La Ventana', 'Hoy por Hoy Madrid' o...