"Hay que presionar a Rusia para que deje de jugar con las hambrunas y cese en su chantaje al mundo con la exportación de cereales"

Odesa (Ucrania)

La invasión rusa de Ucrania comenzó el pasado 24 de febrero de 2021 con una gran ofensiva que amenazaba con tomar el país en apenas unas semanas. Sin embargo, los planes del Kremlin fallaron y el conflicto sigue activo cuando está cerca de cumplirse un año. El enviado especial de la Cadena SER a Ucrania, Nicolás Castellano, analiza a través de varios protagonistas cómo se vive la situación sobre el terreno.

Por un lado, ha hablado con Dmytro Barinov, vicedirector de los Puertos de Ucrania, actualmente en el Puerto de Odessa, uno de los más importantes del país. Barinov asegura que "se ha formado una cola de unos 20 barcos esperando para salir y hay 100 para entrar", debido a que los rusos "solo dejan inspeccionar un barco diario, cuando podrían ser 10". De esta forma, añade: "Cuando empezó la guerra, Ucrania tenía acumulados 20 millones de trigo de cosecha anterior, pero hay que tener en cuenta que se ha añadido la cosecha del año pasado. Ahora hay acumulados 40 millones de toneladas de cereales". Por último, concluye: "Hay que presionar a Rusia para que deje de jugar con las hambrunas y cese en su chantaje al resto del mundo con la exportación de cereales".

Además, Gennadiy Trujánov, alcalde de Odessa, también ha hablado para los micrófonos de la SER, y ha señalado que, a pesar del éxodo inicial al comienzo de la guerra, que cifra en 200.000 personas, alrededor de 63.000 desplazados internos han llegado a su ciudad: "Muchos de ellos tienen necesidades básicas como la alimentación, necesitan sitio donde vivir o la documentación en regla. Agradecemos mucho a la comunidad internacional por esta ayuda en todos los sentidos". Por último, añade: "En Odessa tenemos uno de los centros de acogida de desplazados internos más grandes de Ucrania y son los voluntarios los que están haciendo un gran trabajo, la administración y los voluntarios trabajamos todos juntos".