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La economía española crece un 5,5% en 2022 pero llega a final de año asfixiada por la inflación

La subida de la inflación frena el consumo de los hogares en el último trimestre

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Madrid

El Instituto Nacional de Estadística ha confirmado que la economía española creció un 5,5% en 2022. En un año marcado por una inflación récord y las consecuencias de la guerra en Ucrania, el PIB consiguió aguantar pese a que llegó a los últimos meses del año con evidentes síntomas de agotamiento. En el último trimestre, la economía consiguió crecer un 0,2% pese a que el consumo de los hogares, uno de los principales motores del PIB, se fue debilitando y terminó el año con una fuerte caída.

La alta inflación y los temores de recesión hicieron las familias redujeran su consumo un 1,8% en los últimos tres meses del año, pese a la campaña de Navidad. También las empresas redujeron sus inversiones y solo el avance del gasto público en la recta final de año explica que la economía acabara el año en positivo.

Estos datos confirman que 2022 fue de más a menos en la evolución económica, con un fuerte crecimiento durante la primera mitad del año, especialmente en el segundo trimestre, y una segunda parte con la economía prácticamente estancada. Aunque el PIB siguió creciendo y evitó la recesión que auguraban muchos economistas, en el tercer y en el cuarto trimestre la inflación récord hizo que el crecimiento fuera de tan solo unas décimas.

Con esta confirmación del INE, España se convirtió el año pasado en una de las locomotoras del crecimiento en Europa con un avance del PIB superior al 3,4% de la media de los países del euro y que fue más del doble que el de Alemania (1,9%) y Francia (2,6%) y muy superior al de Italia (3,4%). Aún así, a diferencia de estos países, la economía española sigue sin haber recuperado todavía los niveles de PIB que tenía antes de la pandemia.

El Instituto Nacional de Estadística ha confirmado que la economía española creció un 5,5% en 2022. En un año marcado por una inflación récord y las consecuencias de la guerra en Ucrania, el PIB consiguió aguantar pese a que llegó a los últimos meses del año con evidentes síntomas de agotamiento. En el último trimestre, la economía consiguió crecer un 0,2% pese a que el consumo de los hogares, uno de los principales motores del PIB, se fue debilitando y terminó el año con una fuerte caída.

La alta inflación y los temores de recesión hicieron las familias redujeran su consumo un 1,8% en los últimos tres meses del año, pese a la campaña de Navidad. También las empresas redujeron sus inversiones y solo el avance del gasto público explica que la economía acabara el año en positivo.

Estos datos confirman que 2022 fue de más a menos en la evolución económica, con un fuerte crecimiento durante la primera mitad del año, especialmente en el segundo trimestre, y una segunda parte con la economía prácticamente estancada. Aunque el PIB siguió creciendo y evitó la recesión que auguraban muchos economistas, en el tercer y en el cuarto trimestre la inflación récord hizo que el crecimiento fuera de tan solo unas décimas.

El crecimiento se frenará en 2023

Después de dos años de fuerte crecimiento, todas las previsiones indican que en 2023 el ritmo de avance del PIB recuperará tasas más normales. El Gobierno calcula, en las previsiones presentadas en septiembre, que la economía española crecerá este año un 2%. Y esta misma semana el Banco de España ha estimado que el crecimiento del PIB será del 1,6%, una cifra muy parecida a la presentada la semana pasada por la OCDE.

"Hay unanimidad en prever que la economía española va a continuar creciendo por encima de los países de nuestro entorno" destaca la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño.

Penúltima subida de tipos

Jordi Fàbrega

Periodista en la Cadena Ser desde 2003. Primero...