Ponsatí deshoja la margarita a 48 horas de su cita con el Supremo

Madrid

Clara Ponsatí está citada a declarar este lunes ante el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, por el referéndum ilegal del 1 de octubre. Ponsatí fue acusada de un delito de sedición que, tras la reforma del código penal, se ha quedado en un delito de desobediencia que solo lleva aparejada pena de multa e inhabilitación. A su llegada a Barcelona ya manifestó ante los periodistas que no pensaba acudir a su cita: "Hay un juez en Madrid que tiene muchas ganas de hablar conmigo, pero yo no tengo especial ganas de hablar con él", aseguró, y de momento mantiene esa posición.

Fuentes cercanas a la exconsellera del Govern señalan a la Cadena SER que Clara Ponsatí y su equipo tomarán la decisión en las próximas horas, pero que todo apunta a que dejará plantado a Pablo Llarena. Hay indicios que apuntan en esa dirección. El domingo, Ponsatí estará firmando libros en Barcelona por Sant Jordi, pero el lunes tiene comisión de energía en el Europarlamento y su abogado, Gonzalo Boyé, un juicio fuera de Madrid.

Llarena dictó un auto cuando Ponsatí regresó a España el pasado 28 de marzo en el que la citaba a declarar el próximo lunes y lo hacía "con apercibimiento de que el incumplimiento del llamamiento efectuado conlleva la modificación de su situación personal y su conducción ante este Tribunal por la fuerza pública". El juez ordenará la detención de Ponsatí para que la policía la conduzca ante el Tribunal Supremo, siempre y cuando esté en España porque las órdenes europeas de detención están desactivadas.