La Comisión Europea (CE) ha afirmado este miércoles que la orden de la Junta de Castilla y León que flexibilizaba el control y prevención de la tuberculosis bovina incumplía las normas de la Unión Europea (UE). «Las medidas tomadas por la comunidad autónoma de Castilla y León no están en línea con una serie de provisiones de la UE sobre la tuberculosis bovina», ha indicado a EFE una portavoz comunitaria. Además, ha añadido que la tuberculosis bovina es una enfermedad bacteriana crónica de los animales que puede transmitirse a los humanos. «Por lo tanto, la vigilancia estricta y las medidas para prevenir una mayor propagación de la enfermedad son de gran importancia. La Comisión, en estrecha coordinación con los Estados miembros, está haciendo todo lo posible para erradicar esta enfermedad», ha destacado. La Comisión ha asegurado que está «en contacto a varios niveles» con las autoridades españolas «para garantizar que se toman medidas apropiadas para proteger la salud pública y animal en la UE». Las vacas de Castilla y León vuelven a tener las mismas medidas de control que las de otras comunidades para erradicar la tuberculosis bovina y podrán volver a salir de la Comunidad, tras publicarse este miércoles el auto judicial que suspende la orden de la Junta que relajaba ese saneamiento, que provocó que el Ministerio prohibiera a las reses salir de esa autonomía. El Boletín Oficial de la Comunidad publica este miércoles el auto del Tribunal Superior de Justicia autonómico del lunes que suspendió la relajación de las medidas de saneamiento bovino de la Consejería de Agricultura que devinieron en una orden ministerial que prohibía a las reses salir de la Comunidad y que ahora decae. En total han sido doce días, desde la publicación el 26 de mayo de dicha orden los que la cabaña bovina de Castilla y León -excepto Burgos, León y Valladolid- estuvo sin poder abandonar la Comunidad como respuesta del Gobierno español a una Orden de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Ordenación del Territorio (Vox) que trataba de flexibilizar las medidas de control y erradicación de la tuberculosis bovina. La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León ha asegurado que no renunciará a relajar las medidas de saneamiento ganadero, como el control de la tuberculosis bovina, y ha fiado a poder flexibilizarlas en el futuro cuando «un nuevo Gobierno» tras el 23 de julio lo vea «con otros ojos». También se ha pronunciado el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo: «El Gobierno de Castilla y León avisa: no vamos a dar ni un paso atrás en la defensa de nuestro campo». Así lo ha avanzado este miércoles, en rueda de prensa, el consejero de este departamento, Gerardo Dueñas (Vox), que ha expresado que, en este asunto, se ha «llevado muy al extremo la salud pública»: «No podemos matar a todas las vacas para controlar la tuberculosis», ha argumentado.