Una oyente llama a 'Hoy por Hoy' y pone el estudio patas arriba: "Es que no puedo, es un suplicio"

Hay gente que, de buena, da rabia. Ya sea porque siempre encuentran las palabras adecuadas, porque no pierden jamás la templanza, porque siempre llevan la ropa bien puesta o porque están guapas aunque no hayan dormido, hay personas que dejan en evidencia a los demás y que, por lo tanto, despiertan envidia sana. De ese tema han hablado este lunes en la sección «Mitos 2.0» de «Hoy por Hoy», donde la llamada de una oyente lo ha puesto todo patas arriba. Hasta ese momento, Àngels Barceló, Pepe Rubio y Sergio Castro habían repasado algunos nombres que habían aparecido en una encuesta al equipo del programa. El primero de ellos, el de Martina Klein, modelo, presentadora y humorista que destaca en todo lo que hace; el segundo, el de Carlos Sánchez, al que Pepe Rubio ha definido como «el mejor tertuliano de Madrid». Después ha sido el turno de los oyentes y ha sido María Ángeles, de Miajadas, la que se ha pasado el juego. «A mí me da rabia mi marido», ha dicho nada más empezar, en un tono contundente que ha despertado ya la hilaridad de todos los presentes. «Es una rabia que está llegando ya al odio irracional», ha explicado antes de detallar el motivo de esa animadversión cariñosa: «Es limpio al máximo, pero no es que él sea limpio, sino que consigue mantenerse limpio, mantener limpio el lugar en el que habita... lo máximo». Tremendamente exaltada, María Ángeles ha relatado una anécdota que pone en evidencia sus más que fundados motivos para detestar esa parte de la personalidad de su marido. «Mira, nos fuimos a una romería. Era todo barro, había caído lo indecible. Estuvimos bailando. Él había estrenado ese día unas bambas blancas. Llegamos a casa y las bambas estaban impolutas. ¡¿Pero cómo puede ser?! ¡Es imposible! ¡Se las pisé, se las pisé!», ha contado, a gritos, mientras todos en plató se reían a carcajadas. La risa de Àngels era tal que ha dejado seguir a María Ángeles con su testimonio. «Es un superpoder; una virtud molesta a los ojos de un ser normal», ha continuado la oyente. «No puedo con ello, es un suplicio», ha continuado, «y le digo pero por favor, que yo soy normal, que yo no voy sucia pero nada, él cómo puede salir de casa y venir con las bambas blancas!». Dado el entusiasmo con el que ha contado su caso, era imposible no empatizar con María Ángeles, y por eso Àngels ha reconocido que a ella también le estaba dando rabia su marido. «Pero le quieres mucho, ¿no?», le ha preguntado. «Claro, animalito, le tengo adiestrado», ha contestado la oyente, lo que ha vuelto a provocar las carcajadas en el estudio. «Me costó, me costó, pero le he dicho mánchate, cariño, mánchate. La camisa se puede salir un poquito. Que no es TOC, es que él es así. El coche, si entrase él nada más, solo habría que limpiarlo una vez al año. Claro, que lo cojo yo y ya tiene entretenimiento», ha concluido la oyente una de las llamadas más divertidas de las últimas semanas. «María Ángeles, muchas gracias por este buen rato», la ha despedido la directora de «Hoy por Hoy».

Una oyente llama a 'Hoy por Hoy' y pone el estudio patas arriba: "Es que no puedo, es un suplicio"

María Ángeles ha protagonizado una de las llamadas más inclasificables que se recuerdan en el programa

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