El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha asegurado este lunes que existe un «consenso básico» entre los Veintisiete sobre que una «pausa humanitaria» en la guerra de Gaza permitiría la entrega de ayuda humanitaria a la Franja, aunque ha evitado reclamarla explícitamente asegurando que serán los líderes de la UE en la cumbre europea de este jueves y viernes en Bruselas los que tengan que fijar posición. En rueda de prensa tras la reunión en Luxemburgo de ministros de Exteriores del bloque centrada en la crisis en Oriente Próximo, el jefe de la diplomacia europea ha avanzado que hay un entendimiento común en la UE sobre que una pausa humanitaria facilitaría el acceso humanitario a la población gazatí, víctima de la respuesta militar de Israel tras el ataque sin precedentes de Hamás. «No ha habido ni mucho menos un voto, sino una discusión y puedo decir que hay un consenso básico sobre que una pausa por razones humanitarias sería muy necesaria para que la ayuda humanitaria pueda entrar sin correr riesgos por la acción bélica continuada», ha afirmado el Alto Representante. En todo caso, ha señalado que el asunto irá a la cumbre de los líderes de la UE que se reúnen este jueves y viernes en Bruselas y «serán ellos los que fijen la posición», insistiendo en que el bloque no tiene capacidad para decretar esta medida y son en última instancia Israel y Hamás quienes tienen que llegar a este acuerdo a través de negociaciones. Según Borrell, la pausa consistiría en interrumpir la actividad bélica un tiempo para permitir el acceso humanitario y así aliviar la creciente crisis humanitaria en el enclave palestino. «Es la interrupción de algo que luego continúa. Es un objetivo menos ambicioso que un alto el fuego que implica el acuerdo entre las partes», ha dicho, subrayando que la medida se puede acordar más rápidamente. «Para que la ayuda humanitaria entre es necesario que haya una pausa en la acción bélica. Sino la ayuda humanitaria va a ser víctima de la actividad militar», ha advertido. Estas declaraciones llegan después de una reunión de ministros de Exteriores que ha evidenciado las distintas sensibilidades respecto a la crisis en Gaza, pues aunque todos los Estados miembros piden redoblar la ayuda humanitaria a la Franja no todos están de acuerdo en reclamar una tregua. Así, países como España, Eslovenia, Irlanda o Países Bajos han sido vehementes en la demanda de un alto el fuego humanitario, en línea con la posición de Naciones Unidas, frente a las reticencias de otros como Alemania. El asunto de una pausa humanitaria marcará la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE en Bruselas. Pese a que el primer borrador de conclusiones va en esa dirección, quedan todavía negociaciones a nivel de los Veintisiete y fuentes diplomáticas ven improbable que salga adelante la iniciativa al entender que iría contra el derecho de Israel a defenderse y equipararía al Ejército israelí con Hamás. Por parte de España, el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha asegurado que todos los Estados miembros ha estado de acuerdo en que la población civil palestina de Gaza necesita ayuda humanitaria. «He oído muchísimas intervenciones apoyando mi intervención», ha señalado, asegurando que hay consenso sobre incrementar el apoyo humanitario. «La pausa humanitaria me parece la mejor fórmula», ha reflexionado. Mientras su homóloga eslovena Tanja Fajon, ha llegado a la cita pidiendo un «urgente alto el fuego humanitario» para establecer corredores humanitarios y permitir la asistencia a los civiles en Gaza. «Tenemos que actuar de acuerdo a Derecho Internacional y Humanitario y hacer todo para que el conflicto no se extienda a la región», ha insistido, algo secundado por la ministra neerlandesa, Hanke Bruins, quien ha asegurado que esta medida permitirá «atender a civiles inocentes» y que obtengan ayuda como agua y alimentos. De lado de Irlanda, Micheál Martin, ha pedido que la UE tenga una respuesta coherente ante la crisis y ha defendido la aplicación del Derecho Internacional. «Entendemos que la pausa humanitaria es un mínimo para lograr los suministros (a la Franja)», ha señalado. Enfrente, Alemania ha resumido sus dudas con la metáfora de «cerrar la cuadratura del círculo» asegurando que no se puede contener la catástrofe humanitaria «si continúa el terrorismo en Gaza». «No habrá seguridad ni paz ni para Israel ni para los palestinos si este terrorismo continúa», ha afirmado la ministra de Exteriores Annalena Baerbock, insistiendo en que la lucha contra el terrorismo tiene que ir de la mano de aliviar el sufrimiento de los gazatíes. En la misma línea se ha expresado el ministro sueco de Exteriores, Tobias Billstrom, quien ha dicho que la cuestión no es pedir un alto el fuego sino cómo lograr la entrada de ayuda humanitaria. A su juicio, se puede hacer «de muchas maneras» y ha subrayado que Suecia apoya establecer corredores humanitarios como solicita Naciones Unidas. Según su colega italiano, Antonio Tajani, una pausa humanitaria permitiría el acceso humanitario, mientas que una tregua «significaría que Israel renuncie a su autodefensa y se abstenga de atacar Gaza mientras Gaza sigue lanzando cohetes contra Israel». Por parte de Letonia, el ministro de Exteriores, Krisjanis Karins, ha abogado por que Europa trate con Israel como «amigo» para buscar que actúe de forma distinta, evitando en todo caso reclamar una tregua. «Israel tiene el derecho y la responsabilidad de luchar contra el terrorismo, pero esto no está en contradicción con estar preocupado por las vidas civiles», ha resumido, tras avisar de que «ignorar» a la población civil en Palestina puede llevar a una escalada regional del conflicto que «no está en el interés de nadie». «Necesitamos que Europa hable con Israel, le de apoyo y hablemos como amigos de cómo las cosas pueden hacerse quizás un poco diferente», ha argumentado Karins mientras que su homólogo checo, Jan Lipavsky, ha pedido que se aclare la posición europea ante la «situación inestable» en Oriente Próximo, afirmando que la cuestión es cómo se establece el alto el fuego en Gaza, dado que el enclave lo controla Hamás que sigue lanzando cohetes contra Israel.