Un politólogo, sobre la irrupción de Alvise Pérez: "Este tipo de sentir antipolítico y muy abonado a los bulos está aquí para quedarse"

Se acabó la fiesta, la agrupación ultra liderada por Alvise Pérez, ha conseguido este domingo tres escaños en las elecciones europeas y ha cosechado casi 800.000 votos. Tras estos resultados, aseguró que uno de los objetivos de su formación es combatir la delincuencia y la corrupción con “mano dura” y prometió que intentarán que acabe en la cárcel el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El profesor de Ciencia Política de la Universidad Carlos III, Ignacio Jurado, ha explicado en 'Hora 14' que habrá que esperar a ver cómo evoluciona la plataforma: "La plataforma de Alvise es una cosa y está por ver si se queda o no a lo largo del tiempo. Otra cosa son las ideas, este tipo de sentir totalmente antipolítico y muy abonado a los bulos y a las teorías de la conspiración que hemos visto en Europa, están aquí para quedarse".

Según ha explicado, el perfil del votante de Se acabó la fiesta es joven, entre 18 y 35 años; y varón, en concreto tres de cada cuatro votos han sido de hombres. En cuanto a la ideología, sus votantes se declaran de derecha o ultraderecha. El politólogo cree que con el panorama general tras las elecciones, se aleja la posibilidad de una nueva convocatoria electoral. "Ahora se abre un nuevo período en el que el Gobierno va a dar un nuevo impulso con los Presupuestos Generales del Estado".

El consultor político Pablo Pombo y el presidente de Metroscopia, José Juan Toharia, han advertido este lunes en el Fórum Europa que el fenómeno de Alvise Pérez constituye “una alerta”, puesto que es el reflejo de un “voto de cabreo, de impugnación”. Pombo y Toharia intervinieron en el encuentro informativo que organizó Nueva Economía Fórum en Madrid, donde analizaron el resultado de las elecciones europeas.

El consultor político resumió la estrategia de Alvise Pérez con su formación Se Acabó La Fiesta como “una campaña 100% en la red, que mezcla el trumpismo con el tono del Movimiento 5 Estrellas italiano”, y lo describió como “una mezcla de irreverencia e impugnación”. Ambos coincidieron en que es muy difícil analizar Se Acabó La Fiesta “con los parámetros tradicionales”, ya que “es bastante transversal territorialmente, sobre todo es muy masculino y muy juvenil”.

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En este sentido, Pombo alertó de que sus votantes están metidos “dentro de una cámara de resonancia en la que siempre reciben mensajes que refuerzan su opinión y les parece muy gracioso todo lo que está pasando”. “Yo creo que sí que hay que prestar atención a lo de Alvise”, alertó el consultor político, a la vez que subrayó que el PP debería estar preocupado “porque Vox se convirtió en un partido viejo de un día para otro y ya no son la opción más moderna de la derecha”.

Por su parte, Toharia dijo que este resultado constata la “debilidad” de Sumar, ya que “un señor que nadie conocía hasta ayer por la tarde resulta que tiene lo mismo que Sumar que lleva copando portadas de periódicos y de telediarios años”.

Por ello, concluyó que “la que está muy mal es Sumar”. En cualquier caso, el analista duda de que Se Acabó La Fiesta “tenga futuro”, aunque cree que se debe tener en consideración el resultado que ha obtenido “como síntoma de que algo hay que no se está atendiendo”.

Se acabó la fiesta comparece en una discoteca

Alvise compareció anoche en la discoteca madrileña Cats. Ha cargado contra la “partitocracia” y lo que tildó como “mafia mediática”, comentarios que fueron seguidos por abucheos de los presentes a representantes de medios informativos que estaban en el local. Afirma que quiere superar la división del país con “mano dura contra el crimen y la corrupción” y, en este sentido, afirmó que uno de sus objetivos es que Sánchez acabe en prisión. “Pedro, calienta que sales”, afirmó.

“Más vale que te escondas en un maletero porque te vamos a meter en prisión”, añadió en referencia al jefe del Ejecutivo y aludiendo a cómo huyó de España el expresidente catalán Carles Puigdemont. Alvise afirmó que otro de sus objetivos es que se construya una “megacárcel sin piscina ni gimnasio” en España para, “previa reforma legislativa”, encarcelar a los políticos corruptos y a los delincuentes, de los que citó expresamente a los narcotraficantes.

El dirigente de ultraderecha apuesta por deportar a todos los inmigrantes sin papales, a los que se refirió como "criminales". Explicó que sus eurodiputados logrados donarán su suelo porque es “imposible” combatir este “sistema criminal” si se cobra del mismo.