"La izquierda se va a romper en las negociaciones": un analista advierte de los problemas para gobernar en Francia tras las elecciones

La segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas dejó como gran vencedora de la noche al Nuevo Frente Popular (NFP), la gran coalición de izquierdas que, para sorpresa de todas las encuestas y analistas, logró ser el partido con más diputados e imponerse la Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés), la formación de extrema derecha de Marine Le Pen.

Una victoria que fue posible gracias a la decisión del grupo de izquierdas y de la coalición de Emmanuel Macron, Ensemble, de retirar a sus candidatos en las circunscripciones, donde los candidatos de Le Pen fueron los más votados en la primera vuelta. Y es que de los 280 diputados que pronosticaban los sondeos y las previsiones para RN, que rozaba la mayoría absoluta, finalmente se han quedado en 143.

Florent Zemmouche, director de la revista Grand Continent en español y analista político, ha valorado los resultados de estas elecciones en Hoy por Hoy. El periodista ha comenzado confirmando que la victoria del NFP ha sido posible por “el juego de las retiradas” y ha matizado que este Nuevo Frente Popular no tiene nada que ver con el concepto que tenía en el pasado, sino que se trata de una gran coalición de izquierdas.

Una coalición de izquierdas que, eso sí, cree “sin duda se va a romper en las negociaciones”, ya que hay tres grandes fuerzas: la Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon, el Partido Socialista y los Ecologistas, y “no se sabe muy bien quién es el líder”. “Primero habrá que encontrar un interlocutor por ese lado”, ha apuntado, antes de hablar con Macron para que este nombre a un primer ministro.

Lo que sí está claro es que Francia dejará de ser una excepción respecto a los Gobiernos de coalición -de la Unión Europea, solo el país galo y Hungría no han tenido un Ejecutivo de varias formaciones en los últimos 10 años- y el actual sistema presidencialista dará paso a “un régimen parlamentario”, algo “histórico para esta V República”.

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Macron no tiene una fecha límite para nombrar a un primer ministro -la Constitución no lo establece-, por lo que Zemmouche ha señalado que el presidente francés “quizás va a buscar un poco de estabilidad, calmar un poco el juego y esperar que se estructuren las fuerzas en la Asamblea”, ya que además el primer ministro en funciones, Gabriel Attal, ha presentado su dimisión asegurando que continuará en el cargo “mientras el deber se lo exija”, lo que podría ser hasta pasados los Juegos Olímpicos de París.

Un Attal que para Zemmouche es “uno de los ganadores” porque una de las coaliciones más probables que sale de estas elecciones es “la coalición sin los extremos”, es decir, sin la Francia Insumisa de Mélenchon y sin el RN de Le Pen. “No será fácil, habrá muchas negociaciones”, ha proseguido.

Sin desgaste para Le Pen y Bardella

Pese a no ser el partido con más diputados, Agrupación Nacional ha ganado 54 escaños respecto a las elecciones de 2024. “El grupo sigue su crecimiento, que lleva muchos años”, ha apuntado Zemmouche, que ha señalado la mala campaña entre la primera y la segunda vuelta como otra de las causas de no haber logrado el triunfo. Bardella, el delfín de Le Pen y candidato a primer ministro, “no es un personaje muy provocador, y estos días surgieron candidatos con declaraciones racistas y antisemitas”, lo que provocó una contradicción que le restó votos.

Sin embargo, Zemmouche ha asegurado que Macron no ha logrado uno de sus objetivos con la disolución, que era que RN llegara al poder y así comenzara a desgastarse. “Ahora tienen tres años para continuar esa profesionalización (del partido) y mantenerse en silencio, que lo hacen muy bien siempre”, ha explicado, recalcando que han logrado esquivar esa “trampa” de Macron.