La sencilla receta con una lata de sardinas que se convertirá en tu favorita de diciembre
Solo se tarda 40 minutos en preparar
Una lata de sardinas en conserva. / Carlo A
La sardina, es un pequeño pescado de sabor pronunciado que está lleno de beneficios que merecen ser incluidos regularmente en nuestra dieta. Su principal activo es un alto contenido en omega-3, ácidos grasos esenciales conocidos por sus efectos protectores sobre el corazón y el cerebro.
Este pescado es también rico en calcio, selenio, fósforo, vitamina D y vitaminas del grupo B, elementos indispensables para el buen funcionamiento del organismo humano.
Su aporte de proteínas de alta calidad, esenciales para el crecimiento y la regeneración de los tejidos, lo convierte en un aliado privilegiado para una dieta equilibrada.
En versión fresca o enlatada, la sardina es una opción sencilla y accesible. Cuando está fresca, debe mostrar una carne firme y brillante. En conserva, se ofrece en diferentes preparaciones: natural, con aceite de oliva para los puristas, o con salsa de tomate para aquellos que buscan un sabor más suave.
¿Te has dejado una lata olvidad en tu armario? Esta es la oportunidad perfecta para convertirla en un placer gastronómico. Siga estos sencillos pasos y déjese sorprender por esta receta que despertará su paladar. Aquí te explicamos cómo preparar una deliciosa tarta de sardinas y queso con ajo y hierbas.
Comience por precalentar el horno a 150 °C (termostato 5). Mientras el horno se está calentando, prepare las sardinas abriéndolas con cuidado.
Aplasta las sardinas con un tenedor y añadirlas al queso ajo y hierbas para obtener una textura untuosa, parecida a la espuma.
Extiende la masa quebrada o hojaldrada en un molde para tarta y pica el fondo con un tenedor para evitar que se hinche al hornear. Luego, reparte la mezcla de sardinas y queso uniformemente sobre toda la superficie de la masa.
Espolvoree la parte superior de la tarta con piñones, nueces o un poco de cebolleta, según sus preferencias para darle un toque de crujiente o fresco.
Por último, coloca la tarta en el horno y deja que se cocine durante 40 minutos, hasta que esté dorada y tendrás una fácil y deliciosa receta.
