La serie que cuenta los desplantes de Massiel y Serrat a Franco y la victoria de España en Eurovision

Madrid

El La, la, la llegó más lejos que al corazón de los españoles y consiguió, por una vez, que otros países europeos nos votaran. En 1968, Massiel ganó el festival de Eurovision con una canción de esas que no puedes parar de tararear. La serie La canción (Movistar+) narra la búsqueda para encontrar ese estribillo y al intérprete que le pusiera voz y proyectara una imagen moderna de España al mundo.

La intrahistoria de la victoria de España en Eurovision se cuenta en tres episodios que reflejan el momento de inestabilidad y tensión que vivía el país, todavía en plena dictadura franquista. La polémica estuvo en el ojo público desde que a Joan Manuel Serrat, que había sido elegido para representar a España en el certamen con el La, la, la (escrita por el Dúo Dinámico), se le impidió participar por querer cantar en su lengua materna, el catalán.

"Franco no solo pidió que España ganara Eurovision, la 'Operación festivales' abarcaba más certámenes, de zarzuela o de cine entre otros, con la intentona de que España pareciera que no se había quedado atrás frente a una Europa avanzada", se refiere Alejandro Marín, director de la serie, a la orden que dio Franco para ganar el festival. Ese mandato recayó en Manuel Fraga, por entonces ministro de turismo del régimen, que pidió a los directivos de TVE que buscaran al candidato y la canción idónea. En La canción, el actor Xosé Antonio Touriñán, que interpreta al político gallego, cree que "es la primera vez que se retrata a Fraga en serio". Sin caer en la parodia, Touriñán clava al ministro y sus planes para conseguir que Franco dejara de repetir la frase: "No nos quieren, no nos quieren". Sobre lo poco que Europa miraba a España. Aunque Fraga quería evitar entrar en política. No fue así, porque a la polémica por la sustitución de Serrat tampoco la opacó el triunfo de Massiel.

Tanto las protestas estudiantiles como la represión de la dictadura aparecen en la serie. El director señala que decidieron evitar hacer un "biopic de Massiel y Serrat, y que fuera algo más amplio para retratar la época". Y destaca que el argumento gira alrededor de "la búsqueda de la canción perfecta". La encontraron cuando vieron que no podían parar de repetir el La, la la.