Una experta en nutrición explica en qué consiste la dieta de control de insulina
Ángela Quintas ha explicado en 'Hora 25' que con esta dieta "desaparece la sensación de bajón"

Ángela Quintas explica en qué consiste la dieta de control de insulina
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Madrid
Durante su paso por Hora 25, Ángela Quintas, licenciada en Ciencias Químicas y con un máster en Dietética y Nutrición Humana ha explicado a Aimar Bretos en qué consiste la llamada "dieta de control de insulina" que trata en su libro De la boca a tu salud, publicado por la editorial Planeta.
Lejos de las dietas milagro, las restricciones extremas o las modas pasajeras, Quintas propone una mirada científica y sostenible sobre cómo alimentarnos mejor.
"La dieta de control de insulina se basa en mantener estables los niveles de glucosa en sangre a lo largo del día", ha explicado. ¿El resultado? Dos grandes beneficios inmediatos: "Uno, en las analíticas, mejoran de manera inmediata; y dos, te sientes muy bien, llegarás más cansado al final del día por tu actividad, pero no con sensación de sopor".

Durante la entrevista, Quintas ha ilustrado cómo un desayuno aparentemente saludable, como una rebanada de pan con tomate, fruta y cereales, puede desencadenar un pico de glucosa que obliga al páncreas a trabajar en exceso. "Cuando hay un exceso de hidratos de carbono, el cuerpo convierte ese sobrante en grasa mediante un proceso llamado lipogénesis", ha detallado.
Esa grasa, ha continuado explicando, "se almacena en el hígado, en las arterias o en la zona abdominal, afectando directamente a parámetros como el colesterol o los triglicéridos".
Pero más allá de los datos clínicos, la nutricionista también ha destacado el impacto en el bienestar diario: "Cuando mantienes estables tus niveles de glucosa, desaparece esa sensación de bajón o somnolencia tras las comidas y te sientes con energía constante durante todo el día".
Quintas ha insistido en que el objetivo a la hora de alimentarse bien no es contar calorías, sino comprender cómo responde nuestro cuerpo a los alimentos que ingerimos. "Una dieta eficaz no se basa en la restricción, sino en el conocimiento y en la regulación hormonal, especialmente de la insulina", ha concluido.
¿Debemos hacer caso siempre a lo que el cuerpo nos pide?, le ha preguntado Aimar haciendo referencia a uno de los temas más comunes en torno a la alimentación.
Quintas ha respondido que no. "Hay que saber interpretar lo que el cuerpo nos dice, porque nos lanza muchas señales sobre lo que necesita, pero eso no significa que debamos satisfacer todos sus impulsos", ha razonado.
La clave, según la experta, es aprender a distinguir entre el hambre física y el hambre emocional. "El hambre emocional es ese 'me lo merezco', ese impulso que aparece tras un mal día o como recompensa: en cambio, el hambre real surge cuando el cuerpo realmente necesita energía, por ejemplo, cuando los niveles de glucosa en sangre están muy bajos", ha concluido.




