¿Podemos interpretar los sueños?

Freud fue de los primeros en interpretar los sueños, para él eran la vía directa al inconsciente. Decía que expresaban deseos reprimidos, especialmente cuando eran sexuales o agresivos, así que si soñabas que se te caía un diente, podría tener que ver con la angustia que te genera perder poder, por ejemplo.

Pero hoy en día estas interpretaciones no tienen mucha base científica, no hay un diccionario de sueños universal porque no es lo mismo soñar con un perro si has tenido perro de pequeño que si te ha mordido un perro de pequeño. Puede que el sueño sea muy distinto. Con lo que nos quedamos de Freud es que decía que podían tener un significado personal.

La ciencia apunta que sí que pueden reflejar nuestras preocupaciones, miedos o deseos, pero que no tienen porqué ser necesariamente sueños reprimidos ni exóticos como decía Freud. Se llama hipótesis de la continuidad: lo que te preocupa por el día se puede colar más fácil en los sueños.

Sueños que cambian el futuro

También hay sueños que han cambiado el futuro, o en los que se ha descubierto algo importante. Un ejemplo es lo que contó el químico Kekulé en una charla: soñó con una serpiente que se mordía la cola, y de ahí surgió la idea de una estructura cerrada, que es a día de hoy la estructura cíclica del benceno.

Paul MacCartney también ha contado en muchas entrevistas que en sueños tocó la melodía completa de Yesterday, y que cuando se levantó fue al piano a ver si ya existía la canción.

Otro ejemplo lo explica Dalí en su libro de 'Los sueños secretos de Salvador Dalí'. El pintor dormía con una cuchara en la mano, sobre un plato metálico. Cuando se le caía, el ruido le despertada justo en el momento clave, y de ahí sacaba muchas imágenes para sus cuadros.

La escritora Mary Shelley también contó que se inspiró en un sueño para escribir 'Frankenstein', y ocurrió lo mismo con la tabla periódica: Dmitri Mendeléyev vio en un sueño una tabla en la que todos los elementos caían en su lugar, y al despertarse lo apunto todo.

Aunque nos gustase pensar que los sueños pueden predecir algo, no hay evidencia científica que lo confirme. No hay ningún significado simbólico universal, y depende muchísimo de tu experiencia con lo que estás soñando. Hay un estudio que asegura que la gente le da mucha más relevancia e importancia a sus sueños cuando coincide con sus creencias y con lo que desean. A esto se le llama el "sesgo de confirmación onírico". Por ejemplo, sueñas que te toca la lotería y asumes que es una señal para dar el paso y cambiar de trabajo, porque lo interpretas como una señal de que te va a ir muy bien. Pero, si sueñas que se te rompe el coche antes de un viaje, lo ves como aviso de que tienes que revisar la presión de las ruedas. En definitiva, los sueños no cambian el futuro, pero sí pueden cambiar cómo actuamos nosotros.

Un sueño no tiene porqué contener mensajes ocultos del universo, aunque pueden reflejar nuestro estado emocional. Hay que tener en cuenta que soñar es una expresión, no una predicción.

Por eso no hay que obsesionarse con buscar un significado literal a ese sueño, quizás sea mejor preguntarse: ¿Qué me está preocupando últimamente? Y bueno, también tener en cuenta que a veces los sueños, solo son sueños.