"Los productos reforzados en proteína no son los más saludables": un nutricionista analiza el macronutriente de moda

Madrid

La balda de lácteos de los supermercados se ha llenado de productos 'altos en proteína'. Son muchos los que creen que están faltos de este elemento y recurren a él para conseguir sus objetivos en el gimnasio, o simplemente para intentar llevar un estilo de vida más saludable. Pero, ¿es realmente beneficioso para la salud consumir estos productos?

"Los lácteos azucarados, aunque contengan proteína, no son la mejor opción para consumir este macronutriente. No son los más saludables", ha explicado Aitor Sánchez, dietista, nutricionista, tecnólogo alimentario, investigador y autor del libro Qué pasa con la nutrición, en La Ventana.

La proteína tiene beneficios que están justificados: "Ocurre en el caso de las personas mayores, cuando se busca no perder masa muscular, en épocas de crecimiento y desarrollo o incluso para la saciedad". Sin embargo, a pesar de estos beneficios, la proteína no es necesaria en tanta cantidad.

El nutricionista proponía como proteínas saludables "añadir garbanzos a las ensaladas, atún a las pastas o untar humus a las tostadas". Pues abusar de la proteína como nutriente aislado hace que se dejen de consumir "el resto de nutrientes que tiene los alimentos que contiene proteína de forma natural".

El nutriente de moda

Esta moda, decía el nutricionista, no es nueva. Desde los años 80 ha habido vaivenes de modas alimenticias. Ocurrió con los productos bajos en grasa: "Todo eran cursivas, color rosa y la palabra 'desnatado".

Después llegaron los carbohidratos y los azúcares, dos "enemigos públicos". Ahora, decía, estamos en la etapa en la que todo lo enriquecido en proteína es "sinónimo de salud".

La proteína en polvo y el gimnasio

Muchos deportistas hacen uso de la proteína en polvo para lograr sus objetivos de cambio físico. Pero muchos no ven resultados. Esto se debe, decía el nutricionista, a que la gente quiere conseguir varios objetivos al mismo tiempo. "Quieren perder grasa y ganar músculo", explicaba. Sin embargo, ambos procesos no son compatibles. "Para perder grasa tienes que comer menos y para ganar músculo tienes que hacer lo contrario. El cuerpo no puede optimizar procesos tan distintos. Todo tiene que estar alineado", resaltaba.

En el caso de la proteína, muchos quieren aumentar su masa muscular haciendo uso de ella, pero el problema es que en la mayoría de los casos no están "ingiriendo a la suficiente energía".