Jorge Martín regresa a MotoGP con emoción y puntos: "He sabido tener esa mentalidad de no rendirme hasta el final"

Jorge Martín ha vuelto. Tres meses después de su grave accidente en Qatar, el vigente campeón del mundo de MotoGP regresó a la competición en el Gran Premio de la República Checa, culminando una carrera llena de simbolismo con un séptimo puesto que le permite sumar sus primeros puntos de la temporada. Más allá del resultado, lo destacable fue la emoción del piloto madrileño, que reconoció haberse "derrumbado" antes de la carrera.

"Me he puesto a llorar con mi padre, mi chica y mi entrenador en el motorhome", confesó Jorge a Mela Chércoles en el micrófono de la Cadena SER. "Gracias a eso he soltado la tensión y he podido concentrarme". El piloto, apodado Martinator, admitió que los últimos meses han sido duros: "No encontraba mi lugar, pero hoy he sentido que Aprilia es mi casa".

Un recibimiento de campeón

Aprilia celebró el retorno de su estrella con un recibimiento emotivo en el box. El equipo, que también logró un podio con Marco Bezzecchi (2º), abrazó a Martín como si hubiera ganado. "Es un día muy importante", afirmó Massimo Rivola, director de Aprilia Racing.

Martín, que sufrió once fractura en su caída en Qatar, demostró que nunca se rinde y aguantó la presión de rivales como Fermín Aldeguer. "No tuve el bajón físico que temía", destacó. Su séptimo puesto, tras empezar 12º, confirma que la vuelta es firme.

Márquez domina, pero Martín roba protagonismo

Mientras Marc Márquez sumaba su quinto doblete consecutivo, el foco español también estuvo en Martinator. Su regreso ilusiona a un equipo Aprilia que busca reengancharse a la lucha por campeonatos. "Cuando piloto y equipo dan el 100%, la conexión es rápida", aseguró el madrileño.

Ahora, el parón veraniego permitirá al vigente campeón del mundo seguir recuperándose antes del GP de Austria. Su objetivo es "volver a ser el Martín de siempre". Con lágrimas de por medio, Brno fue solo el primer paso.