Una actriz de 'Juego de Tronos' da un consejo a los niños que están grabando la serie de 'Harry Potter': "Los veo y solo quiero abrazarlos"

Madrid

Sophie Turner tenía solo 13 años cuando protagonizó una de las series más famosas de todos los tiempos, Juego de Tronos. Su interpretación de Sansa Stark le valió una nominación a los Emmy por su interpretación pero admite que, pese a estar en lo más alto, su confianza se fue desplomando poco a poco, a medida que las redes sociales se volvían más infernales.

Cuenta en una entrevista en Flaunt Magazine que tuvo un par de años tranquilos pero que después las redes sociales se fueron haciendo cada vez más tóxicas: "Tuvieron un impacto tan profundo en mi salud mental, más de lo que podría describir. Casi me destruyeron en numerosas ocasiones", se sincera. Empezó a sufrir ansiedad, depresión y un trastorno alimentario pero asegura que la terapia le "salvó la vida".

No puede evitar preocuparse por los actores jóvenes, como los que están grabando ahora la serie de Harry Potter: "Me dan ganas de abrazarlos y decirles: 'Miren, todo va a estar bien, pero no se acerquen a las redes sociales. Sigan siendo amigos de sus amigos de casa, sigan viviendo en casa con su familia, asegúrense de que sus padres los acompañen. Es fundamental tener esa base junto a las grandes y locas cosas que hacen", les aconseja.

Turner tiene dos hijos y tiene claro que hasta que tengan al menos 25 años no les dejaría actuar. Ella tiene ahora 29 años y hace unos meses se ha se vio envuelta en una polémica misógina tras circular una imagen en la que salía ella en una fiesta con el equipo de una de sus últimas series, Joan. Algunos medios la acusaban de ser una madre ausente y una fiestera mientras etiquetaban a su expareja como el padre perfecto, en casa con los niños.

Precisamente sus últimos trabajos en la pantalla son de mujeres poderosas que luchan contra el patriarcado. "Nunca soy tan fuerte como mis personajes y creo que es una forma de expresar mi ira, frustración y determinación, que me da demasiado miedo mostrar. Soy demasiado ansiosa, me gusta complacer a los demás, pero descubro que mi verdadera vía de escape reside en interpretar a alguien en todo su potencial. Pero también, como actriz, de eso se trata: de escapar de uno mismo y convertirse en algo diferente", explica.