Consiguen, por primera vez, trasplantar el hígado de un cerdo a un paciente vivo

Madrid

Lo publica el Journal of Hepatology, de la editorial Elsevier, la revista científica sobre hepatología más importante del mundo. Describe el primer xenotrasplante -los que son entre dos especies distintas - de un hígado de cerdo a un receptor humano vivo.

El paciente es un hombre de 71 años que tenía cirrosis por hepatitis B y carcinoma hepatocelular. Ya no tenía más alternativas médicas y se presentó voluntario y consciente de los riesgos a esta prueba que abre un sorprendente camino científico que ya lleva años siendo explorado.

De hecho, ya habíamos contado numerosos trabajos de este tipo, pero en personas en muerte cerebral. De hecho, el mismo equipo que ahora publica este logro ya lo consiguió en marzo de este año en un hombre en muerte cerebral.

La diferencia es que, en esta nueva publicación científica revisada por pares, sostienen que el hombre estaba vivo, muy enfermo, pero vivo, y que "sobrevivió 171 días tras la intervención, proporcionando una prueba de concepto sobre la capacidad de los hígados porcinos editados para apoyar funciones metabólicas y sintéticas humanas".

¿Cómo lo han hecho?

Los cirujanos utilizaron un injerto auxiliar procedente de un cerdo miniatura del tipo Diannan modificado con 10 ediciones genéticas. Explican que, por ejemplo, que han incluido "knockouts de xeno-antígenos para mejorar la compatibilidad inmunológica y de coagulación". El objetivo principal de todas estas pruebas es conseguir que el injerto sostenga la función hepática del receptor y que el humano no lo rechace como lo que es, un cuerpo extraño.

¿Qué ha pasado con el paciente?

Durante el primer mes, el injerto ha funcionado de forma más o menos correcta. Ha producido bilis y sus factores de coagulación eran los correctos. No había "evidencia de rechazo hiperagudo o agudo". Sin embargo, a partir del día 38 se desarrolló una complicación grave. Una microangiopatía trombótica directamente asociada a xenotrasplante.

El injerto se le retiró al paciente y se le trató con recambios plasmáticos y medicación, pero el paciente sufrió varios episodios repetidos de hemorragias y falleció en el día 171 tras la operación.

A pesar de la muerte, "este caso demuestra que un hígado de cerdo modificado genéticamente puede funcionar en un ser humano durante un período prolongado". Lo dice el investigador principal Beicheng Sun, del Departamento de Cirugía Hepatobiliar de la Universidad Médica de Anhui, Hefei, provincia de Anhui, China. "Es un paso fundamental hacia adelante, que demuestra que tenemos un montón de obstáculos todavía: sobre todo con la coagulación y las complicaciones inmunológicas, que deben superarse".

El doctor Heiner Wedemeyer, coeditor de la revista Journal of Hepatology y experto en hepatología, ha dicho que el trabajo muestra que un hígado porcino modificado genéticamente puede ser injertado y entregar funciones hepáticas clave en un receptor humano". Pero también dice que "Al mismo tiempo, este trabajo destaca los desafíos biológicos y éticos que quedan antes de que tales enfoques puedan traducirse en un uso clínico más amplio"

Según los expertos, el xenotrasplante puede abrir "caminos completamente nuevos" para pacientes con insuficiencia hepática aguda, insuficiencia hepática crónica y carcinoma hepatocelular. Según Wedemeyer, "ha comenzado una nueva era de hepatología de trasplantes".