Fausto Canales, familiar de un enterrado en el Valle de Cuelgamuros: "El Estado sigue en deuda con todas las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura"

Madrid

Fausto Canales lleva toda una vida luchando. Por recuperar la memoria de su padre pero, sobre todo, sus restos mortales, que fueron inhumados en el Valle de Cuelgamuros en 1959 tras ser asesinado en los primeros días de la Guerra Civil. A las dos de la madrugada del 20 de agosto de 1936 un comando falangista irrumpió en Pajares de Adaja, en Ávila, y se lo llevó a la fuerza junto a otras seis personas. Todas fueron asesinadas a 20 kilómetros, en Aldeaseca. En un pozo. De allí el régimen franquistas sacó los restos para llevarlos al mausoleo erigido en El Escorial para mayor gloria de Franco.

Fausto Canales recibió la llamada del Ministro de la Presidencia en julio de 2023. Habían identificado los restos de su padre en la caja 198 de Cuelgamuros. El 20 de agosto de ese mismo año, coincidiendo con el aniversario de su muerte, Fausto recibió esos restos junto a un informe que certificaba la muerte por disparos de arma de fuego.

En este reportaje Fausto Canales nos habla de su lucha y su pequeño triunfo que cierra una herida pero no hace justicia: "El Estado sigue en deuda con las familias y con las víctimas porque no ha habido una sentencia de condena por crímenes de lesa humanidad", sentencia.