Por qué es un error tender la ropa por las noches estas semanas: "Es como si le tiraras una botella de agua de un litro por encima"
El meteorólogo Luismi Pérez nos advierte de un fenómeno muy común
Por qué es un error tender la ropa por las noches estas semanas: "Es como si le tiraras una botella de un litro por encima"
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Madrid
En España estamos acostumbrados a tender la ropa en exteriores. Mientras que en algunos países optan por secadoras para acelerar todo este proceso, nosotros somos más de colgarla en el tendedero y dejar que la naturaleza haga lo suyo. Principalmente porque España es un país con muchas horas de sol que favorece este tipo de métodos mucho más amables tanto con los tejidos como con el medioambiente. Pero hay veces en las que la ropa tarda más en secarse o que acaba apestando por culpa de la humedad. Sobre todo en el mes de diciembre, cuando nos enfrentamos a un fenómeno de lo más singular que se repite año tras año.
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Si la radiación solar se encarga de calentar las distintas superficies, la irradiación se encarga justamente de lo contrario. Cuando cae el sol, el proceso de irradiación se encarga de enfriar todo lo que han calentado los rayos del sol durante el día para devolverlas a su temperatura habitual. Y claro, cuando las noches son más largas, el proceso de irradiación también es más largo, con todo lo que ello conlleva. Pues resulta que esta es la semana con las noches más largas del año.
El fenómeno del relente
¿Y qué quiere decir esto? Que el proceso de irradiación alcanza su duración máxima y que es bastante probable que tu ropa tarde mucho más en secarse. Así lo ha dado a conocer el meteorólogo Luismi Pérez en una nueva entrega del Si Amanece, donde ha explicado el fenómeno meteorológico al que nos enfrentaremos durante los próximos días: "Cuando se enfría una superficie, también se humedece. Y si se humedece, se forma el relente, lo que comúnmente conocemos como rocío. Y si la temperatura va bajando y bajando, ese rocío también se puede llegar a helar".
En declaraciones a la Cadena SER, el meteorólogo ha explicado que todo este proceso también puede derivar en precipitaciones. Pero no en unas precipitaciones cualesquiera, sino en condensación: "No caen en forma de lluvia porque no ha caído de las nubes, sino que ha caído de la misma humedad que se ha acabado condensando, que ha acabado manifestándose en forma de gotículas. Si la noche está en calma, y si no tenemos nubes, estas gotículas dejan entre dos décimas y medio litro de agua por metro cuadrado".
Hasta una botella de agua
De esta manera, y si dejamos la ropa a la intemperie, es posible que acabe empapada: "Pueden llegar a dejar hasta casi medio litro por metro cuadrado y eso lógicamente es lo que hace que por la mañana veamos todo chorreando, que los coches tengan mucha agua o que si dejamos la ropa se nos moje. Mira, estoy justamente mirando ahora la estación meteorológica de Rubí, y pone que ya llevamos dos décimas de rocío. El municipio de Rubí, por ejemplo, va a acabar acumulando unas tres décimas de agua, más o menos, con esa humedad evidente que tenemos".
Y esas tres décimas de agua en un tendedero, con ropa que se queda a la intemperie durante toda la noche, provoca que la ropa acabe empapada con el paso de las horas: "Si tú dejas la ropa al raso, y dejas que le caiga ese relente, es como si le tiraras una botella de agua casi de litro y medio de esas de agua mineral y se la tiraras por encima de toda la ropa, por tanto, eso hace que se vuelva a mojar". Por lo tanto, y si tenemos en cuenta que esta es la semana con las noches más largas del año, nos enfrentamos a un problema mayor si eres de los que tienden la ropa en exteriores.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología que aborda la vida digital desde otro punto...
