Descubre una losa mal colocada en la propiedad del vecino, le denuncia y se lleva 2.000 euros por el chivatazo
Una disputa vecinal que llegó a los tribunales, aunque hubo sensaciones encontradas
Imagen de archivo de una construcción en un jardín / Warchi
En 2018, la concejalía de Seguridad Ciudadana y la Policía Local de Dénia puso en marcha un programa de mediación, conocido como agente mediador, el cual Javier Scotto, el por entonces concejal del área, definió como una herramienta de resolución de conflictos ciudadanos por medio del diálogo y el consenso. Esto nació después de que en los informes policiales diarios se detectaran muchas actuaciones en relación a choques vecinales y comunitarios.
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Comentaron en Radio Dénia de Cadena SER que la tipología de los casos, entre otros, estaban encuadrados en conflictos de convivencia, molestias por ruidos, por mascotas, enfrentamientos por menores, insalubridad, ocio, problemas en el ámbito comercial o por obras. Este no es un programa aislado, sino que en muchas otras regiones se llevan a cabo jornadas parecidas para ayudar a la mediación entre las personas y evitar así consecuencias mayores.
Por ejemplo, el pasado año, el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes organizó una dirigida a la resolución de conflictos entre vecinos con el fin de que los participantes adquirieran nociones de mediación a la hora de solucionar problemas que puedan surgir entre ellos. El objetivo principal es el de llegar a evitar que las disputas acaben en enfrentamientos desagradables e incluso en los tribunales. Esto, sin duda, les podría haber venido muy bien a Alain Terrieur y Marc Dumont.
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Una disputa vecinal y legal
En el medio NostroDomus cuentan la historia de este caso de disputa vecinal en Saint-Rémy (Francia), en la que Alain Terrieur comenzó un proyecto de construcción para una caseta de obra en su jardín, para lo cual comenzó añadiendo una losa de hormigón. Esto parece algo normal, el problema es que su vecino, Marc Dumont, quien tiene una propiedad colindante, se dio cuenta que no se habían respetado los límites precisos de su terreno. Se lo barruntaba, así que lo inspeccionó todo con detenimiento.
Se quedó consternado al ver que la losa se extendía varios centímetros en la parte de la que es propietario. Dumont asegura que se dio cuenta al momento de que "esto causaría problemas", así que avisó a su vecino. "Intenté hablarlo con Alain, pero él estaba convencido de que había actuado correctamente. Fue entonces cuando decidí emprender acciones legales", manifestaba el afectado, que inició un procedimiento que duró varios meses, aunque terminó de manera satisfactoria para él... ¿o no?
El tribunal dio la razón a Marc y condenó a Terrieur a pagar más de 2.000 euros por los daños ocasionados, sin embargo, no fue un proceso agradable para él. "Este caso ha tenido un impacto considerable en mi vida diaria", se sinceraba Marc, el cual explicó que "el estrés de que hayan invadido mi espacio personal y tener que emprender acciones legales ha sido una auténtica pesadilla". De esta forma, vemos cómo ni aun dándole la razón y hasta una compensación económica lo recuerda como un triunfo, demostrando el valor que tiene aprender a tener una buena convivencia entre vecinos.
