Un apático Real Madrid patina ante el Xàtiva

Un Xàtiva muy trabajado defensivamente supo contener bien al Real Madrid (0-0), que se mostró muy apático, y en el que el jugador más destacado fue Isco, al que Ancelotti decidió cambiar cuando el Madrid mostró más peligro.

Sin Cristiano, sancionado, ni Bale, que se quedó en Madrid por una gripe, ni Xabi Alonso, ni los lesionados Varane ni Khedira, Ancelotti hizo pocas concesiones. El italiano se decidió en la portería por Casillas. El capitán se quedó con la competición copera en ese inaudito reparto que decidió el técnico italiano al inicio de temporada. Diego López en Liga y Casillas en Champions y en Copa.

Un once muy español, todos excepto Casemiro y Di María, y de jugadores jóvenes bien escudados por Casillas, Ramos, Arbeloa y Di María saltaron a un atestado estadio La Murta con pocas ganas y mucho frío. A los blancos les costó entró en juego. Un voluntarioso Xàtiva supo contener a un equipo desganado al que le costó acostumbrarse a una cancha estrecha y al césped artificial. Tan sólo se salvaron de la quema en la primera mitad un ordenado Casemiro e Isco, que dejó detalles de genio.

Uno de los más apáticos fue Di María. El argentino anda con el ceño fruncido. Estos días se ha rumoreado mucho con una posible salida en el mercado de invierno. El argentino ve que con tan pocos minutos las opciones de ir al Mundial de Brasil se complican, pero el Madrid no tiene ninguna intención de dejarlo ir antes del final de la temporada. El argentino pide más minutos pero la Copa le atrae poco y menos aún si es en dieciseisavos ante el Xàtiva. Su desgana era tan clara que Ancelotti lo sacó del campo a los diez minutos del segundo acto. Sus más y sus menos tuvieron en la banda el italiano y el argentino, que se marchó directamente a los vestuarios.

Por el argentino entró Benzema. Antes, en el descanso, el italiano había hecho otro cambio. Se quedó en la caseta Arbeloa, que esta vez ocupó el flanco izquierdo mientras Carvajal fue el lateral derecho, y en su lugar entró Marcelo.

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En el segundo acto el Madrid puso algo más de criterio. Isco tomó la batuta y llegaron las primeras ocasiones de gol. La primera fue del propio Isco a los 15 minutos de ese segundo acto. Apenas un minuto después una buena jugada del malagueño la culminó Morata. No supo el canterano si central o tirar y ni centró ni tiró y la ocasión se quedó en nada. La siguiente oportunidad fue para Jesé, que mandó el balón al lado del poste izquierdo de la meta de Francis.

Ancelotti decidió entonces apagarle la luz a su equipo, sacó del campo a Isco y dio entrada a Modric. Muy pocos entendieron la decisión del italiano porque a partir de ahí pasó poco más.

Un Madrid muy apático no pudo ante un buen Xátiva, que demostró por qué lleva siete jornadas sin recibir un gol en la liga. Los blancos se dejaron los deberes para el Bernabéu, donde tampoco estará Cristiano Ronaldo y en el que necesitará una victoria para conseguir el pase a octavos.

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