Retorcer y desafiar la ley
La querella de la fiscalía contra Artur Mas por el 9N ha terminado con el Govern en funciones de la Generalitat protagonizando la insólita imagen de cargos institucionales protestando a las puertas de un palacio de Justicia

Madrid
Buena parte del cambio que insistentemente reclaman encuestas y sondeos de opinión tiene que ver con el deterioro de las instituciones y la invasión política partidista de todos los rincones del Estado.
Cuando más falta nos hace la serenidad, el respeto mutuo, la separación y delimitación clara de funciones y las reglas del juego democrático, más ejemplos nos asaltan de todo lo contrario.

Pepa Bueno

Pepa Bueno
La querella de la fiscalía contra Artur Mas por el 9N, que los fiscales no veían clara, que el gobierno forzó y que le costó la dimisión al Fiscal General del Estado, ha terminado con todo un gobierno, el Govern en funciones de la Generalitat, protagonizando la insólita imagen de cargos institucionales protestando a las puertas de un palacio de Justicia.
Retorcer la ley o desafiarla conduce a más retorcimientos y a más desafíos. Nada de lo que está en juego arreglaremos por esas vías y ojalá que el tribunal resuelva pronto, dejando en manos de la política lo que sólo la política puede resolver.




