La sorprendente manía de las autoridades

Madrid

Una de las cosas más sorprendentes de España, es la facilidad con que las autoridades se manifiestan en la calle. En otros países es muy raro ver a ministros, al equivalente a presidentes de Comunidades o a alcaldes al frente de protestas callejeras. Sobre todo porque se supone que, en tanto que autoridades, son representantes del Estado y participan de su poder. Manifestaciones como la que acompañó al presidente de la Generalitat, no llamarían tanto la atención si no fuera precisamente porque a su frente estaba el gobierno en pleno de la Generalitat y 400 alcaldes.

Ampliar

Cerrar

Lo curioso del asunto es que entre esos consejeros y entre las autoridades que acompañaron a Mas, estaban algunos de quienes más reclamaron que cayera todo el peso de la ley contra los centenares de jóvenes que en junio de 2011 se manifestaron alrededor del Parlament protestando contra los recortes anunciados por Artur Mas. El propio president declaró por videoconferencia ante la Audiencia Nacional para acusar a esos jóvenes de coacción y violencia. Su testimonio ayudó a que se impusieran a algunos de ellos penas de cárcel, muy duras y muy polémicas.

Es verdad que los manifestantes de ayer tuvieron una actitud totalmente pacífica y que los alrededores de los tribunales no cuentan con la misma protección jurídica que los parlamentos. Pero también lo es, que no se trataba de ciudadanos comunes, sino de personas que ejercen la autoridad del Estado y que son ahora los jueces los que dicen sentirse coaccionados. Quizá ni los parlamentarios ni los jueces deberían sentirse tan fácilmente violentados en su independencia, pero en todo caso, sería la actitud de las autoridades la menos justificada, ¿no?