¡Hay que mojarse!

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Madrid
Este domingo pasado iniciamos en Ser Consumidor una ronda de entrevistas – el domingo próximo más - con los principales grupos políticos para saber qué soluciones y alternativas plantean para nuestros problemas cotidianos, al margen de los grandes problemas, el paro, la corrupción, la economía en general, la sanidad o la educación.
No queremos otra cosa que los principales partidos bajen al “barro”. Que nos digan qué piensan de problemas más cotidianos, que piensan hacer si gobiernan, o incluso, si están en la oposición, para solventarlos. Por ejemplo, ¿qué piensan de las preferentes? ¿Y de los abusos en los intereses de ciertos créditos? ¿Y de las clásusulas abusivas? ¿Tienen solución para las hipotecas suelo? ¿Hay alternativas para evitar subidas continuas del recibo de la luz? ¿Potenciarán a las asociaciones de consumidores o dejarán que se hundan? ¿Piensan hacer algo para propiciar la competencia en las gasolineras? ¿Qué piensan del consumo colaborativo?
Los programas no se prodigan en estos aspectos, no bajan a estos detalles, aunque es verdad que hay enormes diferencias entre unos partidos y otros. Auque es verdad que en estas elecciones se ven ciertos “apuntes” interesantes sobre eliminación de las hipotecas suelo, la dación en pago, las energías renovables, incentivos al consumo energético responsable, los desahucios, la pobreza energética, sanciones para los clásusulas abusivas…
Ya sé que una cosa es lo que dice y otra lo que se hace, con habituales incumplimientos, pero no sobra saber si los principles partidos póliticos saben cómo abordar y solucionar nuestros problemas del día a día. Al menos, luego se lo podremos tirar a la cara.
Y es muy importante poder pulsar – ayer se vieron algunos atisbos en la búsqueda de cambiar las cosas – si están de un lado y de otro. Ya sabemos que los consumidores tenemos la sensación, no pocas veces, que se adoptan medidas pensando en los grandes empresas y sus intereses económicos y no tanto en los clientes. Que no se facilitan medios a las asociaciones para que puedan hacer políticas más efectivas de protección de los consumidores, quizá porque no interesa, que no dejan de mirar para otro lado ante problemas que nos afectan a menudo, como los de banca, telefonía, energías…Con matices, pero sin grandísimas diferencias hasta ahora.
Y ahí es donde pretendemos que se mojen los políticos y sus partidos. Con el consabido adiós al bipartidimo, también en el mundo del consumo empezamos a ver que aquí casi todos están empezando a cambiar algunas cosas…




