Mesas con estilo y libres de polémicas
Lo siguiente en cenas navideñas pasa por guías de cómo vestirse, menús económicos... y dejar a un lado lo que pueda pasar este 20 de diciembre
Mantel, velas, copas... y tranquilidad. Hay que dejar fuera del menú los temas peliagudos.(GETTY)
Madrid
Puede que ya haya sobrevivido a su cena de empresa. Puede que no la haya tenido y esté esperando a la Nochebuena y la Nochevieja. Puede, en ese caso, que esté cerca de enfrentarse a estos retos anuales que ponen en juego la capacidad de tolerancia y diálogo. Por eso esta sección ha buscado esta semana lo siguiente en cenas navideñas.
Tenemos por un lado las cenas de empresa y, por otro, las familiares. Difícil saber cuáles tienen más riesgos. De entrada, empezamos con una buena noticia: dicen los hosteleros que en nuestro país han mejorado las reservas este año. La mala, que en las de empresa cada vez es más habitual que sean los trabajadores los que se la paguen y no los jefes. Otro apunte negativo: según la última Encuesta de Población Activa, hay 4.850.000 personas que no tienen cena de empresa porque no tienen trabajo.
Intentamos encontrar buena noticia: en un 'profundo' trabajo de investigación, hemos detectado que en Google hay infinidad de consejos para elegir el mejor look a la hora de ir a las cenas. Se ve que lo siguiente en cenas navideñas es escribir guías de estilo. Un manual más útil que hemos encontrado es el de la abogada laboralista Donna Ballman que ofrece consejos para desenvolverse en las cenas navideñas de empresa. Recomienda no bailar de manera excesivamente lasciva, no ligar con compañeros o no cantar en el típico karaoke. Palabra de letrada.
En las cenas familiares, lo siguiente es echar cuentas. Bueno, lleva siendo lo siguiente desde que empezó la crisis. En la revista Vice se han arriesgado a hacer una cena de Navidad para cuatro personas por menos de 50 euros en total. Y se puede, con un poco de creatividad, se puede. Aunque no convence demasiado su propuesta de churro con tuétano.
Cuidado, que las cenas, caras o baratas, pueden acabar con los platos rotos, como en la escena de American Beauty. Los temas espinosos, estos días, es mejor dejarlos a un lado en la mesa. Lo siguiente en cenas navideñas este año será dejar a un lado lo que pase mañana.
