Un robot de última generación
Mariano Rajoy podría plantearse que el nuevo ministro de Economía sea una máquina a la que metan unos cuantos datos sencillitos como la orden de obedecer siempre lo que le dicten desde el BCE o desde Bruselas
Un robot de última generación
01:25
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000004931665/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Madrid
Tiene Mariano Rajoy en estos momentos la extraordinaria oportunidad de apuntalar su reconocida fama de apasionado de la ciencia, afición de la que ya nos ha dejado apuntes legendarios como los hilillos de plastilina, los conocimientos de su primo o los recortes en I+D. Así que podría sustituir a Guindos por un ultramodernísimo robot de última generación, mejor hecho en Alemania que en Japón, si pudiera ser. La cosa es simple: se le meten unos cuantos datos sencillitos como la orden de obedecer siempre lo que le dicten desde el BCE o desde Bruselas; marcar un límite, por arriba, a los salarios, y otro límite, por abajo, a los beneficios empresariales. Y, por supuesto, una firme recomendación: que los bancos y Florentino Pérez hagan siempre lo que se les antoje. Éxito seguro. Tanto como la gran idea de Rajoy de no cambiar a más ministros. ¿Dónde iba a encontrar a alguien tan brillante y acertado como el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido? ¿Habrá alguien más españolísima que la ministra de Defensa, Dolores Cospedal? ¿O que retuerza los datos con la pericia de la ministra de Trabajo, Fátima Báñez? ¿Y alguien tan borroso, difuso y transparente como el de Exteriores, Alfonso Dastis, que todavía dudamos de si en verdad es ministro? No, no, no cambie usted nada, señor Presidente, que ya tiene lo mejor de cada casa.
Más información