Rescate a contrarreloj en Tailandia

Madrid

Desde el pasado 23 de junio, 12 niños y su monitor, están atrapados en una cueva en la provincia de Chiang Rai, Tailandia. Hoy se conocía la noticia del fallecimiento de uno de los buzos del cuerpo de elite de la Marina tailandesa mientras realizaba labores para rescatar a los niños. El buzo se habría quedado sin oxígeno mientras regresaba de la cueva.

El fallecimiento ha sido un mazazo para los miembros del equipo de rescate. La corresponsal de El País en Asía, Macarena Vidal, asegura que “algunos buzos nos dicen que hay que seguir adelante. La muerte del compañero no nos puede distraer del objetivo que es sacar a los niños”.

Las previsiones meteorológicas no favorecen el rescate ya que se prevén nuevas lluvias a partir del domingo, algo que complicaría aún más la situación crítica de la cueva. “Entre los buzos, algunos creen que el rescate tiene que ser ya porque si no el agua volverá a subir”, cuenta Macarena Vidal.

El rescate es muy complicado por la situación abrupta de la cueva. “El problema no es solo el buceo, existen pasos estrechos,  con visibilidad nula y el factor psicológico que también es importante” explica Javier Medina, jefe de la Brigada de Espeleosocorro de la UME. Por otro lado, el aire de la zona donde se encuentran los niños se está enrareciendo y hoy ser registraba solo un 15 % de oxígeno en la cámara, según nos informaba desde la entrada de la cueva Macarena Vidal.

A la espera de que el ministro del Interior tailandés ofrezca comparecencia en rueda de prensa, los equipos de rescate estás buscando posibles grietas para poder encontrar otro paso para sacar a los niños, con la ayuda de los especialistas que buscan nidos de golondrina en Tailandia.

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