Realidad desquiciada

Madrid

En el mapa de los sonidos de hoy... La realidad desquiciada.

Ha ocurrido esta tarde. En la manifestación convocada por Ciudadanos para denunciar una agresión han terminado agrediendo a un cámara de Telemadrid. Ese es el riego, que los más hiperventilados, que los más energúmenos, que aquellos que solo piensan con la bandera, pasen de retirar lazos a repartir golpes. Hoy, Albert Rivera e Inés Arrimadas han provocado una imagen de gran carga simbólica: los líderes del partido más votado en Cataluña y del cuarto más votado en España retirando personalmente un símbolo político en el que se ven representados muchos catalanes.

Entre los sonidos del día... Un cambio de criterio.

El Gobierno, el PSOE, ya no quiere hacer aquello que propuso y apoyó en su día: resignificar el Valle de los Caídos, convertirlo en un espacio para la memoria y la reconciliación. Había urgencia para sacar a Franco, pero a partir de ahí, en Moncloa no aspiran a nada más que a hacer del Valle un cementerio civil y a mantener la basílica católica. Además, el presidente se reafirma en su intención de impulsar una comisión de la verdad. Interpreta, por tanto, que este país tiene un problema con la versión de su propia historia. Pero, ¿es realmente así? ¿De verdad hay en España un problema con la versión de lo que fue Franco y de lo que significó su dictadura? El Gobierno tiene, si quiere afrontarlas, dos urgencias quizá mayores: impulsar de verdad la apertura de fosas, la recuperación de los restos de los asesinados y la devolución a sus familias; y la apertura de los archivos que nos permitan mejorar el relato de la vida de un criminal y de su dictadura.

Y en el mapa de los sonidos de hoy... Aquello de lo que deberíamos hablar si abandonáramos la dinámica de los bandos.

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Cuando dejemos de hablar de los que se enfrentan, tendremos que hablar de nosotros mismos: de sanidad, de educación, de pensiones, de políticas de igualdad, de políticas de medioambiente, de desarrollo sostenible y de impuestos. El Gobierno no se cierra a discutir sobre una subida del IRPF para las rentas más altas, como pide Podemos, y ese es un debate fundamental que, a nuestra manera, también tapamos. Porque, sí, hay que reconocerlo, también contribuimos a tanto ruido.