¿Covidiotas? No, gracias

Madrid

Bienvenidos un día más, una semana más a esta ‘Ventana’ de la resistencia y el confinamiento. Hoy tocaría recuperar el concepto de las dos Españas, pero en una acepción distinta que es la de las fases. Medio país está en fase 0, el otro medio en fase 1, quién más quién menos ya sueña con la fase 2, o con la 3… Pero todo esto, que supone -sin duda- una buena noticia porque significa que vamos a mejor; o que hemos pasado lo peor. Eso se puede complicar por dos motivos: porque lo vivamos -y así lo están agitando algunos dirigentes políticos- como una especie de carrera entre territorios y de memorial de agravios. Y se puede estropear también si cunde la sensación de que esto ya está chupado.

Hoy revelaba Fernando Simón que la salida de los niños hace dos semanas no se ha notado apenas en la curva de contagios; a ver si podemos decir lo mismo dentro de unos días con la salida de los adultos, porque la verdad es que algunas escenas que se ven por la calle no invitan precisamente al optimismo. Por cierto, no está de más apuntar que dos países modélicos en su lucha contra el coronavirus, que lo han hecho bastante mejor que nosotros, Alemania y Corea de sur, están con el miedo en el cuerpo. En Alemania dos regiones, dos länders, han tenido que volver a aplicar medidas de confinamiento; y en Corea, la capital, Seúl, ha vuelto a clausurar los bares. O sea que mejor tomárselo con un poquito de calma.

España empezó tarde y mal su respuesta a la pandemia, pero las contundentes medidas aplicadas después es obvio que han dado frutos. Enredarse ahora en una competición política o en la insumisión civil, ¿nos puede servir para algo? Sí. Para empeorar, sin duda. Así que, por favor, no seamos covidiotas.