El mayor berrinche de la reina de Inglaterra en mucho tiempo

Madrid

El año 1992, que trajo muchos eventos memorables a España, no le dio más que disgustos a la cabeza coronada más veterana de Europa. A finales de año, Isabel II, la monarca del Reino Unido, dijo que “1992 no va a ser un año que recuerde con gran placer”. También lo definió como un “annus horribilis”.

Y lo cierto es que todos los disgustos le vinieron a Isabel no por cosas que hiciese ella mal, o por desgracias relacionados con su reino. Las desgracias fueron obra de su familia. La princesa Diana publicó un libro que no dejaba precisamente bien a Carlos, su hija Anne se divorció, su sobrino se suicidó… y su hijo Andrés se separó de su esposa Sarah Ferguson. Pero no quedó ahí la cosa. Justamente el 20 de agosto de 1992 la reina tuvo que ver cómo su nuera salía en a portada de un tabloide, tomando el sol con John Bryan, un millonario americano. Pero lo realmente escandaloso es que ella estaba en topless… y en una de las fotos Bryan salía chupándole un dedo del pie. Sarah fue apartada de la familia real y se ganó la antipatía de buena parte de los británicos.

Lo curioso es que el tiempo no solo le ha quitado el papel de víctima a Andrés, sino que ha demostrado que él ha dañado más la imagen de los Windsor que todo el resto de la familia. Porque Sarah igual fue un poco despreocupada, pero él se acostó con una menor que salió con él coaccionada por Jeffrey Epstein, un multimillonario americano mucho peor que el de Sarah.