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El tren asturiano que ni está, ni se le espera

Cruzar Asturias de este a oeste es un viaje de más de 24 horas en el FEVE, una línea ferroviaria que agoniza por falta de mantenimiento y escasez de personal

El tren asturiano que ni está, ni se le espera

El tren asturiano que ni está, ni se le espera

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Tapia de Casariego

El sector ferroviario vive tiempos de cambio. Esta semana se culminaba el proceso de liberalización del sector comenzado durante el gobierno de Felipe González. Los trenes de la compañía francesa Ouigo, del grupo SNFC, comenzaron a operar la ruta de alta velocidad que une Madrid y Barcelona. La francesa será la primera y, de momento, la única empresa competidora de Renfe tras décadas de monopolio estatal.

Mientras Madrid y Barcelona están cada vez más cerca, lejos de las grandes conexiones ferroviarias hay trenes a los que ni están ni se le esperan. Cruzar Asturias de este a oeste es un trayecto en el que se tarda 24 horas y 26 minutos, en dos días diferentes. El FEVE, el ferrocarril de vía estrecha, agoniza y ha perdido al 66% de sus usuarios en los últimos 15 años. La línea que conecta todos los pueblos y ciudades de la cornisa cantábrica es una constante de averías, retrasos, escaso manteamiento, paradas fantasma y escasez de personal y los núcleos de población que atraviesa corren el riesgo de quedarse definitivamente desconectados. La España a dos velocidades: una a 300 kilómetros por hora y otra a 30.

Estación de Tapia de Casariego

Estación de Tapia de Casariego / Daniel Sousa / Cadena SER

Viajamos hasta la primera estación en funcionamiento del occidente asturiano, Tapia de Casariego, por donde solo pasa un tren al día. Los vecinos recuerdan cuando la estación era un hervidero de gente y el día que el dictador acudió a inaugurarla. Andrés el último jefe de estación que hubo, se marchó hace décadas. “Aquí ya nadie cuenta con que este tren funcione. Esto está muerto. Ni mercancías ni pasajeros. Pasa el tren turístico una vez al año y poco más”

Hace más de un año, el colectivo Asturias al tren presentó al gobierno autonómico y a Renfe una propuesta para reorganizar las paradas y adaptar las frecuencias a los horarios laborales y universitarios. Ahora, por fin, el gobierno autonómico lo está estudiando. “Si pusieran una especie de cercanías entre Luarca y Ribadeo, que es donde se mueve la gente por aquí, yo creo que funcionaría”.

Daniel Sousa

Daniel Sousa

Es redactor en EL PAÍS Audio y colabora en ‘A Vivir que son dos días’ de la Cadena SER. Ganador del...

 
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