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Las extrañas habitaciones de la cultura

"Cada aspecto de la vida, cada oficio, tenía también su propio lenguaje secreto. Decir sépalo no era conjugar el verbo saber, sino nombrar las hojitas verdes que le hacen de cuna a las flores"

Las extrañas habitaciones de la cultura

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Barcelona

En la clase de naturales detestaba las partes de la flor, pero me encantaban los tipos de hojas. De la flor, me gustaban las palabras que la rodeaban por todas partes menos por una, que la unía a la realidad. Pistilos, estambres, corolas, pétalos y sépalos, cáliz, ovarios y óvulos..., una mezcla de religiosidad y de vida. Poco después, salió un disco de Stevie Wonder que se llamaba La vida secreta de las plantas. Era verde y, como era doble, se abría igual que una flor. O una planta carnívora. Cada aspecto de la vida, cada oficio, tenía también su propio lenguaje secreto. Decir sépalo no era conjugar el verbo saber, sino nombrar las hojitas verdes que le hacen de cuna a las flores. Las faldas de las bailarinas hawaianas son sépalos con ukelele. Hicimos un herbario con plantas que recogíamos en los descampados, en el río, en los escombros... Las llamadas plantas nitrófilas. Buena gente. Duras de pelar. En la misma época de aquel disco de Stevie Wonder, un amigo, que quería ser ingeniero agrónomo, me prestó un libro muy gordo de plantas medicinales. Era el famoso Dioscórides de Pío Font Quer. Estaba muy bien escrito, lo mismo que el disco de Stevie Wonder estaba muy bien tocado. Eran tal para cual, y el uno llevaba al otro y viceversa en un bucle de misterio y aprendizaje. La cultura es un laberinto de puertas. A veces, uno se pierde y acaba en habitaciones extrañas. Así fue como el libro de plantas medicinales me llevó a la magia y a las brujas, y a las cartas del Tarot. Cada vez que me salía el ahorcado, pensaba en John Houston y en Paul Newman haciendo de juez entre el bar y la Biblia. Aunque el mejor juez de todo el Lejano Oeste, el más roto y el más humano, es el de la novela Warlock, escrita por Oakley Hall. Ya es antigua, pero la recomiendo de corazón.

 
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