'The Hair Truck', la peluquería sobre ruedas: "Tenemos varios pueblos a la espera y estamos buscando personal"

Madrid

Los ‘food trucks’ son cada vez más populares y muchos otros negocios ya se están sumando a la moda de ponerse a cuatro ruedas y lanzarse a la carretera. Es lo que hizo ‘The Hair Truck’, una peluquería ambulante fundada por Eneko y Natalia, un turolense y una zaragozana que recorren los pueblos de Aragón en los que no hay peluquería cortándole el pelo a sus vecinos. La idea es poner remedio a la falta de servicios de la España vaciada. Hoy hemos hablado en ‘La Ventana’ con Natalia López, una de las impulsoras del proyecto.

Natalia y Eneko llevan ya tres años sobre ruedas: “Nosotros tenemos una peluquería convencional en Zaragoza desde hace ocho años. Hace tres, empezamos a bromear con la idea de tener una peluquería móvil porque, cuando íbamos a nuestro pueblo, los familiares siempre nos pedían el favor de arreglarles el pelo o hacerles el tinte y de ahí surgió la idea”.

A partir de ahí, compraron una caravana, la acondicionaron y se pusieron en marcha. Al principio, se lo tomaron como una prueba piloto para ver cómo respondía la gente. Poco a poco, vieron que la gente respondía y decidieron ampliar el negocio: “Trabajamos todo el año con la ambulante porque en la peluquería física ya tenemos a gente que se encarga de ella. Ahora estamos de vacaciones, pero hacemos exhibición durante todo el año”.

Pueblos en lista de espera

Las caravanas que utilizan son pequeñas para no tener problemas de accesibilidad al entrar en determinadas localidades, pero tienen de todo. Dentro hay lavacabezas, secadores, calefacción, aire acondicionado y utensilios para los peluqueros.

Con solo una de estas caravanas, Natalia y Eneko pueden llegar a visitar unos 20 pueblos al mes. Y ya hay cola: “Tenemos a la espera varios pueblos en Teruel y Zaragoza. De hecho, ya estamos buscando más personal”. Su objetivo ahora es colaborar con peluqueros de toda España y dar servicio a más municipios.

Aunque Natalia reconoce que están teniendo problemas en algunos ayuntamientos por el papeleo, que se hace “pesado” a veces. También tiene claro que no irían a ningún pueblo en el que ya haya una peluquería convencional o alguna persona que se dedique ya a hacer ese trabajo puerta a puerta.

La pandemia también ha sido dura para ellos. De hecho, un negocio como el suyo requiere un refuerzo mayor en las medidas de seguridad: “La crisis ha complicado mucho nuestro trabajo. En las caravanas hay que tener mucho cuidado a la hora de dar las citas para que no se junte mucha gente”.