El historiador de la Moncloa que pronostica la España del futuro

Madrid

El 70% de la población actual seguirá viviendo en la España de 2050. El dato no deja de llamar la atención en un país en el que siempre nos quejamos del cortoplacismo que proponen nuestros políticos. Con la intención de empezar a poner las luces largas desde las instituciones, a principios de 2020 se creó la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia de País a largo plazo.

El historiador Diego Rubio (Cáceres, 1986) es su director y explica que este tipo de organismos existen desde hace décadas en otros países. También las instituciones supranacionales –el Parlamento europeo, la Comisión o la OCDE, por ejemplo– ceden cada vez más espacio a la prospectiva, que se define como el conjunto de análisis y estudios realizados con el fin de explorar o de predecir el futuro. En este sentido, según Rubio, posiblemente España ha llegado tarde, pero ha apostado de forma decidida por el asunto.

Sostiene el historiador que, casi de manera natural, "los intereses de los individuos suelen ser de corto plazo". Cree que la democracia "es cortoplacista por diseño", más aún en este contexto de "acelaración del debate mediático". Los intereses de la sociedad, en cambio, son de largo plazo.

En mayo de este año, apoyados en la colaboración de un centenar de expertos de diferentes materias e ideologías, la Oficina de Prospectiva y Estrategia presentó el informe España 2050. Pero, ¿qué continuidad puede tener un proyecto iniciado por el ejecutivo de un color político si cambia el gobierno? Para Rubio esta es una materia que no debería estar sujeta a la discrepancia política y por eso aspira a que seamos "capaces de consensuar algunos objetivos que eviten los vaivenes políticos y nos permitan mantener un ritmo permanente". De hecho, argumenta que su equipo tenían otras ocupaciones en la academia o el sector privado, y que no estaban (ni están) afiliados a ningún partido político y tienen sensibilidades políticas muy diversas.